Un grupo de pescadores fue asaltado la tarde del lunes frente a las costas de San Vicente. Sujetos a bordo de una embarcación de color azul los intimidaron, amarraron y los dejaron a la deriva llevándose sus pertenencias.

Carlos Delgado, uno de los afectados, reveló que mientras se encontraban en su jornada de pesca que había iniciado alrededor de las 16:00, varios sujetos con arma en mano, se abalanzaron hasta su panga y a base de agresión verbal y física, los amarraron, llevándose consigo el motor de su panga.

Luego, hicieron lo mismo con otra embarcación que estaba cerca. Incluso a uno de los tripulantes le dieron varios cachazos con el arma porque opuso resistencia, según el pescador.

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En total, se llevaron 4 motores. Los pescadores indicaron que a los piratas no les tomó ni una hora ejecutar su ataque."Allí nos quedamos a la deriva, hasta que fuimos rescatados por unos amigos pescadores que dieron aviso a los familiares y nos remolcaron hasta la orilla", agregó.

Delgado aseguró que pierde unos 3.000 dólares porque no se le llevaron la red, pero a quienes se les llevaron la embarcación, las redes y los motores, perdieron más del triple.

"Una panga con un motor de 75 está por los 6 y 7 mil dólares y eso es pérdida para los pescadores que no pueden protegerse de ninguna manera, porque no podemos cargar armas para repeler a los piratas, que, sí andan armados hasta los dientes", dijo un pescador artesanal.

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Joffre Alvia, pescador de Leonidas Plaza, manifestó que el Gobierno Nacional donó una panga de rescate que está ubicada en San Vicente para el uso de emergencias como estas, pero cuando se pide su ayuda, solicitan dinero para el combustible y para los tripulantes de la misma.

"Después de esto, toca aguantarse y no salir a pescar hasta esperar que haya buenas noticias de los motores robados y que la marina de seguridad a los pescadores", dijo.

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Aníbal Sánchez, capitán de Puerto de Bahía de Caráquez, lamentó lo sucedido, destacando que es un caso aislado, ya que desde hace varios meses no se había tenido denuncias parecidas. Comentó que el último caso parecido no se había dado en el mar sino tierra adentro.

Determinó que, aunque no ha existido la denuncia correspondiente, una vez que ellos se enteraron, iniciaron una búsqueda y un control sobre el mar, revisando a toda embarcación en la rada, para tratar de investigar lo sucedido.

De las cuatro embarcaciones afectadas, dos aún no se han sido halladas, así como los cuatro motores. 

El ataque de los piratas dejó un herido, quien tenía una cortadura en la cabeza.

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Los pescadores no han realizado la denuncia ante la Fiscalía, ya que, según dicen, "eso también demanda gastos económicos". (I)