Hace 50 años un avión turbo-hélice Electra 2, matrícula HC-AMS de la compañía Ecuatoriana de Aviación con 77 pasajeros y seis tripulantes al mando fue secuestrado y desviado de su plan de vuelo hacia La Habana (Cuba).

Inicialmente, la nave llegó de Miami a Guayaquil con 23 pasajeros en tránsito que se dirigían a Quito e hizo escala en el aeropuerto Simón Bolívar -llamado así en ese entonces- para recoger a 32 pasajeros que también iban a la capital, 18 con destino a Miami y cuatro que irían a Panamá.

A los cinco minutos de iniciado el vuelo, Dean Ricker quien era el capitán de la nave se puso en contacto con la torre de control y reportó que iba sobre Vinces con un cielo totalmente despejado, por lo cual se suspendía el uso especial de instrumentos atmosféricos. Según el reglamento, a una hora y media a la entrada del territorio de Pichincha debió comunicarse, pero se perdió contacto e inmediatamente fue declarado en emergencia, por lo que se activaron los medios de búsqueda y comunicación.

Publicidad

Durante ese lapso, los secuestradores habían irrumpido en la cabina de mando gritando ¡Cuba, Cuba! y los pasajeros fueron amenazados de muerte. El piloto tuvo que comunicarse con la torre de control para pedir urgentemente abastecimiento de combustible, por lo que fue derivado al aeropuerto de Barranquilla (Colombia). Esto tomó cerca de dos horas en los que nadie pudo bajar ni subir, sin embargo, el intendente del lugar dispuso una discreta vigilancia del avión con un batallón de soldados que permaneció a prudencial distancia a la expectativa de cualquier acontecimiento.

El grupo de piratas del aire estuvo organizado y dispuesto a lo largo del avión.

Pese al percance, el avión siguió con destino a La Habana y no presentó novedades. Varios pasajeros coincidieron que fue un grupo de jóvenes: 14 hombres y dos mujeres, quienes formaron el audaz grupo de los piratas del aire, dispuestos y organizados en el avión con ametralladoras, pistolas, granadas de mano, cuchillos y tacos de dinamita.

Publicidad

Una vez aterrizado el avión, el jefe del grupo, a quien sus compañeros se referían como 'Chicho' dirigió un discurso para pedir disculpas por el secuestro y también lanzó expresiones hacia Fidel Castro, otro joven explicó que el objetivo de ir a Cuba era para buscar justicia y verdadera libertad; y luego ordenó que le abran la puerta del avión para que primero desciendan los integrantes de la banda. Al salir fueron recibidos por un grupo de milicianos que al parecer tenían conocimiento del hecho e inmediatamente subieron a un vehículo en el que desaparecieron.

Curiosidades del secuestro

  • El destino inicial del vuelo era Miami con escala en Quito y Panamá.
  • El grupo de jóvenes secuestradores manifestó que habían embarcado en calidad de turistas pertenecientes a Amazonas Tour.
  • Una camarera que se encontraba en el momento en que irrumpieron en la cabina comentó que uno de los secuestradores era un hombre joven aparentemente de ascendencia latina. Él les manifestó que era dominicano y que había estado un año en Vietnam.
  • Entre la banda figuraba un muchacho menor de edad, quien dijo que solo su madre sabía de este hecho.
  • En primera instancia se sospechó que los autores del secuestro a mano armada en el aire eran estudiantes del Colegio Nacional Nocturno Huancavilca, y que al parecer se habían cambiado de nombre; a los días esto se aclaró por parte de las autoridades de la institución, ya que los datos no correspondían a los alumnos matriculados.
  • Según informaron dirigentes de la compañía propietaria de la nave secuestrada, este desvío de ruta obligada en La Habana le significó una pérdida para la empresa de 20.000 dólares; si se toma en cuenta que en la capital cubana por derechos de aterrizaje pagaron 8.000 dólares, a lo que se sumó el mantenimiento de los pasajeros y el viaje de retorno a Panamá y Quito.
  • En el avión viajaron funcionarios de gobierno como el licenciado Armando Espinel, secretario general de la Administración del presidente de la República -en ese entonces- José María Velasco Ibarra; la esposa y los hijos del doctor Ángel Duarte Valverde, quien se desempeñaba como subsecretario de Finanzas. También fue a bordo el doctor Luis Vernaza Trujillo y el señor Alfonso Pólit Roldós, conocido comerciante de Guayaquil.
  • La mayoría de la tripulación estaba compuesta por ecuatorianos, solo el capitán Dean Ricker, era nacionalidad estadounidense. Carlos Moreno Merino, Vilma Moreno de Quevedo y Constantino Quevedo fueron identificados como supuestos implicados en este hecho. (I)