Pese a que ya ha transcurrido un mes desde que la Interpol (Policía internacional, por sus siglas en inglés) analizó el pedido de difusión roja hecho por la justicia ecuatoriana contra el expresidente de la República, Rafael Correa, las autoridades de Ecuador aún siguen a la espera de una respuesta oficial que acepte o niegue dicha solicitud.

El pedido de difusión roja llegó una vez que la jueza nacional Daniella Camacho, el 3 de julio pasado, ordenó prisión preventiva contra el exmandatario dentro del juicio por el plagio del activista político Fernando Balda. En esa audiencia, Camacho también pidió que se remita a la Interpol la difusión roja para que se capture y extradite a Correa, quien está radicado en Bélgica.

La solicitud de difusión roja fue ratificada el 7 de noviembre pasado por Camacho, cuando llamó a juicio por el delito de plagio al expresidente, a su exsecretario de Inteligencia, Pablo Romero; y a los exagentes de Inteligencia Raúl Chicaiza y Jéssica Falcón.

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Hasta el mediodía de ayer la oficina de enlace de Interpol en Ecuador no recibió respuesta alguna sobre el tema.

El coronel Galo Muñoz, jefe de Interpol Ecuador, se encuentra en Dubái en la asamblea general de la Interpol y trascendió que hoy él tendría una reunión con funcionarios de esa institución para hablar de varios temas, entre los que estaría el de difusiones rojas solicitadas por Ecuador.

El procurador del Estado, Íñigo Salvador, sostuvo que de forma oportuna e inmediata Ecuador remitió la información requerida para la difusión roja, es decir, la Policía Judicial (PJ) a través de su oficina de enlace hizo el pedido a la Interpol y demostró la existencia de un juicio penal contra Correa y el requerimiento que hacía la justicia contra él.

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Salvador reconoce que el hecho de que sea un expresidente el requerido y que este alegue una persecución política probablemente está demorando la decisión de la Interpol.

“En estricto sentido la Interpol no debería sucumbir a ningún tipo de presión (...) Confiamos que una entidad internacional del prestigio como la Interpol, un ente eminentemente técnico, no tenga en cuenta nada más que las consideraciones procesales. Hay una orden de prisión preventiva dictada dentro de un proceso penal por un juez competente, por lo tanto la Interpol debería aceptar el pedido cursado”, indicó.

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El coronel Pablo Ramírez, jefe subrogante de la PJ, explicó que aún se está a la espera de la notificación y cualquier respuesta la dará el Comando General de la Policía. (I)