Más de 1.000 personas iniciaron en Honduras una marcha con la intención de llegar a Estados Unidos, atravesando México, para huir de la pobreza y la violencia que azotan al país.

Familias completas, mujeres cargando bebés en brazos, niños y jóvenes iniciaron una caminata en el oeste de la nación, luego de que el vicepresidente estadounidense, Mike Pence, pidió en Washington a los mandatarios de Honduras, Guatemala y El Salvador frenar la migración en masa, la corrupción y la violencia.

La llamada Caminata del Migrante partió de San Pedro Sula, la ciudad más activa comercial e industrialmente pero también la más violenta de Honduras, donde el 64 % de los hogares viven en la pobreza. (I)