Los diálogos entre delegados de los sectores industriales del atún y camaronero tenían ya cuarenta días y aunque hubo consenso para dar un voto de confianza al Ejecutivo, hay preocupación por el alza de 25 centavos de dólar por galón del diésel industrial que usan estas industrias y que golpeará toda la cadena de procesamiento de pesca, indica el presidente de la Asociación de Atuneros del Ecuador (Atunec), Ricardo Buesh.

Como flota atunera analizan bajar gastos en mantenimiento del aparataje productivo: 117 barcos, y priorizar el gasto en las áreas de tripulación, sin que ahora esto signifique despidos, al menos en lo concerniente a quienes capturan pesca en alta mar.

Aún no hay fecha para indicar cuándo se darían algunas efectos. “Lo que tenemos que analizar es el sacrificio que tenemos que hacer para poder sobrellevar este incremento, y que no se vea reflejado en la cadena productiva y en la parte social y económica del país”, sugirió Buesh, quien dijo que a fin de año harán una evaluación que represente a toda la cadena de captura y procesamiento.

Publicidad

Solo el 2017 la exportación de pesca le representó al Ecuador cerca de $ 1.500 millones, dijo Luiggi Benincaza, director de Atunec, y las proyecciones de incremento en la operatividad del sector extractor de pesca sí tendrán repercusiones a fines de año.

Según cifras de Atunec, en el 2015 la flota atunera invirtió unos $ 51 millones para comprar combustible diésel 2 y tras el anuncio del incremento se estima que este año la inversión llegará a los $ 61 millones.

Por ahora Benincaza indicó que han solicitado al régimen conformar una mesa de entendimiento para ver cómo se mantiene el tema de competitividad. “A nivel nacional se importan 61 millones de galones de combustible, el 35% es el combustible que consume toda la flota, no solo los atuneros, sino los 577 barcos industriales que están en el registro del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca”.

Publicidad

Raúl Paladines, armador pesquero mantense y gerente de Paladines Hermanos, reiteró que sí habría inconvenientes cuando se haga un repaso del costo de extracción de pesca. Explicó que si un barco consume al año en promedio $ 4 millones en combustible, con el alza subirá a $ 5 millones.

A él le preocupa que a futuro los costos de la cadena de producción tiendan a incrementar y aquello representaría quedar fuera ante competidores asiáticos: “Al quedar fuera de mercado de qué valdría subir la lata (de atún) cuando ya la gente no lo va a comprar, el tema es muy delicado. Vamos a tener reuniones esta semana los sectores productivos para ver cómo paliamos este incremento”.

Publicidad

El ministro de Energía y Recursos Naturales no Renovables, Carlos Pérez García, dijo ayer que aún hay cosas por resolver porque las embarcaciones no están bien clasificadas entre pequeñas e industriales y esa tarea le corresponde a la Secretaría de Acuacultura y Pesca. Tampoco se define cuándo se instalarían las mesas para revisar los otros subsidios. (I)

10
Millones de dólares
sería el recargo anual de la flota atunera por el aumento del precio del diésel industrial que usan.