La decisión del Gobierno de Ecuador de “no continuar” en la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP) es para “sumarse a los esfuerzos de algunos gobiernos de la región por buscar la salida del presidente (de Venezuela) Nicolás Maduro”, cuestionó el secretario del órgano regional, David Choquehuanca, en un comunicado divulgado este viernes.

El pasado jueves, el canciller ecuatoriano, José Valencia, anunció que Ecuador “no continuará su participación dentro de la ALBA” y argumentó que esa decisión respondía a su preocupación por la falta de voluntad política de Maduro para buscar una solución al problema migratorio de su país.

Choquehuanca lamentó las declaraciones de Valencia. Y advirtió que esto “coincide con la estrategia política que se desarrolla en Sudamérica, de atacar a la integración latinoamericana y caribeña”, y pone como ejemplo la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur).

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La decisión de Ecuador es, para el exembajador Mauricio Gándara, un mensaje de que Ecuador “rompió con Nicolás Maduro”. “Se han quedado solos en la ALBA, solo tienen el apoyo de Bolivia y Nicaragua”, opina Gándara, quien cree que “era insostenible”.

El excanciller José Ayala Lasso señala que la posición ecuatoriana es una “expresión de solidaridad entre países”.

“​El Ecuador ha hecho bien en separarse, y la razón tiene más fuerza porque se refiere a la indiferencia con la que la ALBA está mirando la crisis en Venezuela. Eso demuestra que se censura fuertemente al responsable de esa crisis: Nicolás Maduro”, expresó.

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La ALBA se constituyó en el 2004 por iniciativa de los fallecidos presidentes de Cuba, Fidel Castro, y de Venezuela, Hugo Chávez. En los siguientes años se unieron otros nueve países, entre ellos, Ecuador, que lo hizo en junio del 2009, en el mandato de Rafael Correa.

El catedrático Santiago Basabe cree que esta decisión buscaría “generar un ambiente distinto en el concierto político, diplomático y económico”.

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Y el analista político Juan Cuvi cree que se está “marcando distancia con una línea hacia los gobiernos populistas. Es una decisión para poder acceder a ciertas fuentes de crédito de Estados Unidos, frente a la angustia económica”.

Para Rosa Mireya Cárdenas, miembro del Parlamento Andino y exministra de Correa, la acción de Moreno “debilitará a los pueblos”. Es, dice, “como que se están cerrando los espacios de integración y otro de ellos es la Unasur”.

Como parte de la ALBA se firmó el Tratado Constitutivo del Sistema Unitario de Compensación Regional de Pagos (SUCRE). Según su último informe de rendición de cuentas, divulgado en su portal web, se observa que el mayor nivel de operaciones ‘transadas’ se dio entre Ecuador y Venezuela, “quienes concentraron 83,84% del total tramitado”. (I)

Lenín dijo:

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Hay que acudir a las instancias internacionales en las cuales se debe expresar la opinión. Sí, estamos preocupados por el número de muertos y presos políticos, pero siempre apelamos a que las partes puedan dialogar y resolver las controversias.22 de septiembre 2017 (BBC)