El excoordinador jurídico de Petroecuador Marcelo Reyes López fue condenado en Estados Unidos a 53 meses de prisión por haber participado en operaciones de lavado de dinero. Así lo confirmó a EL UNIVERSO la portavoz del Departamento de Justicia de ese país, Nicole Navas Oxman.

Reyes López es el segundo funcionario condenado en Miami por su participación en delitos de lavado de activos, derivados del caso de pago de sobornos durante la administración de Petroecuador en el Gobierno anterior y que se descubrió por los llamados Papeles de Panamá.

El primero fue Arturo Escobar Domínguez, quien deberá cumplir cuatro años. Ambos se declararon culpables ante las autoridades estadounidenses.

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En los documentos judiciales de EE.UU., las autoridades de Florida aseguran que Reyes López recibió $ 2,1 millones en sobornos y que se daba una vida de lujos: solo en Miami poseía seis propiedades por un valor de $ 3,5 millones.

Asimismo, los fiscales indicaron que, a diferencia de Escobar, Reyes ocupaba un cargo de alto rango. Citaron un correo electrónico de febrero de 2013, enviado a un contratista de Petroecuador, en el que se indica que a los “jefes” de la estatal petrolera había que pagarles el 16% de sobornos y a los mandos medios el 5 %.

El contratista citado en los documentos es Ramiro Andrés Luque Flores, de la empresa GalileoEnergy, quien también es procesado en EE.UU.

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La portavoz del Departamento de Justicia confirmó que Luque Flores se declaró culpable de violar la ley estadounidense de Prácticas Corruptas en el Extranjero y de regulaciones contra el lavado de activos. Su proceso se sigue una de las cortes de Nueva York y los cargos fueron presentados en octubre de 2017. Flores aún espera la sentencia que podría llegar a un máximo de cinco años, precisó la portavoz.

De acuerdo con los documentos del proceso, el monto de los sobornos pagados por el empresario, de origen argentino, podría llegar a $ 3,2 millones. Este Diario habló con el abogado de Luque en Quito, pero señaló que no podía comentar sobre este caso que se lleva en el extranjero. (I)