Luego de un complejo rescate a cuatro de los 12 niños futbolistas atrapados en la cueva, junto con su entrenador, Tailandia permanecía a la expectativa de la salida del resto del grupo que fue suspendida y se esperaba que sea reanudada hoy.

A través de un difícil recorrido de más de cuatro kilómetros, los cuatro chicos, que están en mejor estado físico, cada uno de ellos guiado por dos buzos profesionales, fueron los primeros rescatados y llevados a un hospital.

La operación fue suspendida para darle a los buzos tiempo a reponer el suministro de oxígeno y garantizar que todos los preparativos estén completos.

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Trece especialistas de “nivel mundial llegados de países con experiencia en espeleología” y cinco miembros de la unidad de élite SEAL de la Marina de Tailandia guían a los niños, que deben sumergirse a través de oscuros y estrechos pasadizos que a veces no tienen más de 0,6 metros de ancho, lo que ha supuesto un desafío para algunos de los buceadores de cuevas más importantes del mundo.

Todo el operativo para liberar a las personas que quedan en la cueva podría demorarse entre dos y cuatro días dependiendo del clima.

Las autoridades dijeron que las lluvias que se esperan podrían aumentar el nivel del agua en la cueva, lo que sumado a la caída del nivel de oxígeno en el espacio dieron sensación de urgencia al rescate. Se espera un clima tormentoso para las próximas dos semanas, lo que agrava los riesgos.

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Los servicios de rescate lograron estabilizar los niveles de oxígeno insertando una tubería de varios kilómetros para hacer llegar este gas a la zona en la que los chicos están arrinconados. (I)