Del 13 al 15 de julio la Casa de la Cultura, núcleo del Guayas (CCG), será escenario de la primera edición de Disrupt Challenge, un programa de innovación dirigido a personas que quieren emprender dentro de la industria creativa.

La iniciativa, mentalizada por la consultora One Nest, contará con charlas y workshops en temas de economía naranja, macrocambios culturales, speed mentoring, entre otros. Los interesados que cumplan con los perfiles de diseñadores, desarrolladores, negocios y artistas podrán postular a una de las 40 becas hasta el 22 de junio a través de www.disruptchallenge.com.

Los participantes seleccionados deberán superar retos que serán impuestos durante los tres días que dura el evento. Para esto serán divididos en equipos multidisciplinarios. Los desafíos tienen que ver con la preservación cultural, experiencia para espectadores, difusión de espectáculos y el ecommerce para artistas.

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Las propuestas planteadas por los emprendedores serán presentadas ante un jurado, quien elegirá al equipo ganador. Los premios incluyen espacios de coworking en Plataforma Coworking y membresías a la Asociación de Jóvenes Empresarios.

Néstor Ramón Orozco, director de One Nest, cuenta que esta primera edición tiene como objetivo la generación de soluciones creativas e innovadoras a problemáticas de la industria cultural.

“La creatividad y el talento para lograrlo lo tenemos, en Disrupt Challenge encontrarán el camino para convertirlo en realidad”, puntualiza.

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Hasta el momento han recibido cerca de 300 postulaciones. Entre los exponentes se encuentra: Hugo Goicochea, gerente general de IBM Ecuador; Johanna Ruiz, experta en el diseño de la innovación; Michael Müller, especialista en diseño web y Hugo Avilés, actor.

Apostando por la cultura

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Orozco sostiene que la cultura se está convirtiendo en un importante dinamizador de la economía en el país. “Hay que potenciarlo para así aprovechar al máximo el talento y la creatividad de nuestra gente”. Cree que Guayaquil ha elevado su oferta cultural en los últimos años.

Para Fernando Naranjo, director de la CCG, la cultura va más allá de las bellas artes.

Explica que el patrimonio, las habilidades gastronómicas, la conservación de la memoria, la necesidad de llegar a un pacto ecológico con la naturaleza; también están inmersas en el tema. “El nivel de desarrollo cultural en Guayaquil no depende de la clásica visión que hemos tenido sobre lo que es cultura ”, agrega.

Naranjo reconoce que los actores y gestores culturales muchas veces tienen un problema para encontrar un nicho de estabilidad dentro de la economía. Por lo que se necesita innovar las formas de pensar, es decir, trabajar en la cultura social.

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Como director de una entidad de artes, considera que un evento como este les permitirá mejorar en el desarrollo de los públicos y la difusión de los espectáculos. “Esto ayudará a una mejor preservación del patrimonio, de la sabiduría ancestrales que se están perdiendo”. (I)