Pastores de iglesias evangélicas se congregaron este lunes frente a la Gobernación de Tungurahua para emprender una jornada de oración por la paz ante acontecimientos en la frontera norte y por la seguridad ciudadana.

“Nos preocupa mucho que nuestra ciudad (Ambato), conocida como ciudad de paz, vaya perdiendo principios, que ahora se manifiesten en asesinatos y delincuencia”, expuso Rodrigo Andachi, de la Asociación de Cuerpo de Pastores y Líderes de Tungurahua, en referencia al asesinato del taxista Manuel Alarcón, el 3 de mayo.

La jornada incluyó la entrega de un manifiesto al gobernador Juan DeHowitt. También se puso a disposición a profesionales de esta iglesia, para ayudar en diferentes tareas. (I)