Miguel Mario Díaz-Canel Bermúdez, el recordado ‘muchacho’ que recorría las calles en short y bicicleta en su natal provincia de Villa Clara, que lucía cabello largo y gustaba del rock, hoy cumple 58 años, un día después de heredar el poder histórico de los hermanos Fidel y Raúl Castro, al que ha prometido lealtad y respeto al legado de casi seis décadas.

En 1987 Díaz-Canel se incorporó a la Unión de Jóvenes Comunistas y empezó a trabajar como profesor de Ingeniería. En una carrera que inició en los niveles más bajos de la burocracia partidaria, el ahora gobernante ascendió hasta convertirse en 2013 en el primer vicepresidente del país.

“No es un improvisado”, dijo Raúl Castro, en su discurso de despedida, quien resaltó de Díaz-Canel la “solidez ideológica, sensibilidad política, compromiso y fidelidad hacia la revolución”.

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“Ha sido el mejor. Teníamos la absoluta certeza que habíamos dado en el clavo (…) sobre su elección (…), y de que cuando yo falte pueda asumir el cargo de primer secretario del Partido Comunista”, dijo Castro en el anuncio más relevante. Así, el poder político y el poder del Estado se aglutinarán en una sola figura, como ocurrió con Fidel y Raúl, lo que consolidaría la autoridad de Díaz-Canel en una incierta fase de cambios.

Castro recordó que Díaz-Canel fue el único sobreviviente de una docena de jóvenes que el partido preparó para que llegaran a ocupar altos cargos.

En su primer discurso como gobernante, Díaz-Canel aseguró que Cuba seguirá siendo ‘verdeolivo’, y que tendrá a Raúl como guía, en una señal hacia el ala dura revolucionaria de militares históricos, más reacia a sacrificar el legado socialista bajo la espada de las reformas.

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Para el nuevo gobernante, Raúl Castro, quien permanece como líder del gobernante Partido Comunista hasta 2021, “encabezará las decisiones de mayor trascendencia”.

El nuevo presidente enfrenta varios desafíos. Tendrá que mantener el equilibrio entre la reforma y el respeto a los principios revolucionarios, pero deberá esforzarse por actualizar el modelo económico, un proyecto iniciado por Raúl.

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A nivel diplomático, lidiará con el recrudecimiento del bloqueo que EE.UU., que endureció con la llegada de Donald Trump al poder, quien dio marcha atrás al acercamiento de finales del 2014.

“(Con la continuidad de la revolución) será como enfrentaremos las amenazas del poderoso vecino imperialista, aquí no hay espacio para una transición que desconozca o destruya el legado de tantos años de lucha”, apuntó.

En el plano económico, lo más importante son las reformas económicas, clave para afrontar la crisis.

“El modelo de gobierno de los Castro probablemente pasará por una transición generacional y quizás adoptará un estilo de liderazgo más institucional y burocrático que carismático y personal como el que estableció Fidel y reformuló Raúl”, consideró Jorge Duany, director del Instituto Cubano de Investigación de la Universidad de Florida. (I)

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Reacciones

Maduro apoyo ‘irrestricto’
El Gobierno venezolano felicitó al nuevo presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, a quien le expresó apoyo ‘irrestricto’ para ‘profundizar’ las relaciones entre ambos países, al tiempo que manifestó su admiración al ya expresidente Raúl Castro.

Evo: Garantizar el legado
El presidente de Bolivia, Evo Morales, expresó su felicitación al nuevo gobernante cubano. El mandatario dijo que “es la garantía de la profundización del legado revolucionario del comandante Fidel Castro, su hermano Raúl y el pueblo cubano”.

Ecuador desea éxitos
La canciller ecuatoriana, María Fernanda Espinosa, reiteró la voluntad del Gobierno de Lenín Moreno de seguir manteniendo ‘excelentes’ relaciones bilaterales con Cuba y le deseó éxitos al nuevo presidente de ese país, Miguel Díaz-Canel.

EE.UU.: Acabar represión
EE.UU. pidió al nuevo presidente que ‘escuche’ el deseo del pueblo de un país “más libre y democrático”, que mejore su calidad de vida y acabe con la ‘represión’, y dijo que Díaz-Canel tiene la opción de dirigir el país hacia un nuevo paradigma. (I)