Era uno de los más esperados en los desfiles cívicos de San Vicente y Bahía de Caráquez. Salía con un tambor y desfilaba con la banda de música del colegio técnico San Vicente.

Ángel Basurto Moreira, de 50 años, no era estudiante activo del plantel, pero su pasión por la música y su gusto por los desfiles hacía que las personas le dieran un espacio para unirse a estas actividades.

La noche del jueves dejó de existir, después de varias horas de intentar luchar por su vida, tras graves lesiones en el cráneo que sufrió al ser atropellado por una moto.

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Angelito, como lo llamaban, tenía síndrome de Down y entrada la noche del jueves caminaba por la zona del malecón Leonidas Vega. Testigos del hecho indican que una moto lo arrolló.

Personas que se encontraban por el lugar se percataron y dieron aviso a los bomberos, que lo trasladaron hasta el hospital Miguel Hilario Alcívar de Bahía de Caráquez.

Los médicos le dieron los primeros auxilios, pero la gravedad de sus heridas y un trauma craneoencefálico complicaron su cuadro.

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Olga Zambrano, quien conocía a Angelito, lo recuerda como una persona alegre, que daba gusto verlo en los desfiles, por el entusiasmo que desprendía.

Angelito era extrovertido, cuando quería era un oficial de buses interprovincial, era viuda para fin de año, un bombero o integrante de la banda de guerra del tradicional colegio técnico San Vicente.

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Un retrato de su imagen se ubicó en un mural en la iglesia Santa Rosa de Lima, de San Vicente, para recordarlo.

Rossana Cevallos Torres, alcaldesa de San Vicente, expresó que Angelito era una bendición para la gente porque siempre andaba con una sonrisa y su presencia se volvió parte de la cotidianidad de la localidad, donde era muy querido.

Su partida desató muestras de solidaridad y mensajes de cariños en las redes sociales, en las que la gente compartía fotos en sus distintas facetas. “Adiós, amigo, Dios recibe a uno de sus ángeles que estaban en la tierra”, “Te vamos a extrañar” o “Desde arriba nos cuidarás”, indicaban unos.

Su cuerpo fue velado en la sala de San Vicente y se montó una capilla ardiente en la explanada del edificio municipal. A las 17:00 de ayer, se tenía prevista su sepultura. (I)

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