Según Marco Proaño, jefe de la Zona 3 de la Dirección Nacional de Delitos Contra la Vida, Muertes Violentas, Desapariciones, Extorsión y Secuestros (Dinased), la víctima vivía sola, y que el cuerpo sin vida tenía huellas de hematomas en el rostro y signos de violencia.

De acuerdo al protocolo de la autopsia, la muerte se produjo por politraumatismos cráneo-encefálicos y hemorragia interna; además, dentro del análisis de la escena no se encontró ningún objeto contundente, por lo que aún se recaba información, señaló Proaño.

Lo que se pudo comprobar, según dijo, es que estuvo amordazado y amarrado con las propias prendas de vestir, y que lamentablemente no pudo pedir auxilio.

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Proaño informó que se realizaron algunos allanamientos y se recopilaron varios indicios que serán procesados y analizados dentro de la investigación. También se solicitó a la Fiscalía para que se delegue a la Dinased con el fin de realizar las primeras diligencias.

Dentro del análisis de la escena, y por lo que advirtieron algunos familiares, faltaban algunos artículos, como plasma, DVD, celular y una libreta de ahorros de una cuenta bancaria, comentó Proaño.  (I)