Durante el largo feriado de carnaval, ladrones ingresaron a tres viviendas de una urbanización de la vía a la costa y a una casa en Urdesa.

Varios de los perjudicados pusieron la denuncia en la Fiscalía, mientras otros aseguraron que no hacen nada porque consideran que a pesar de que la Policía Judicial investigue, nadie les devolverá lo robado.

El primer caso que se conoció ocurrió la tarde del pasado martes en la calle Primera entre Ficus y Guayacanes, en Urdesa, norte de Guayaquil.

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Ahí, la teniente Ángela Vélez, del circuito Urdesa, explicó que durante su recorrido normal en la zona notó que la puerta de la vivienda estaba entreabierta por lo que fue a verificar.

Cuando se acercaba en la patrulla, un sujeto habría disparado en varias ocasiones contra la unidad policial, impactando una de las balas en una llanta del vehículo.

Vélez detalla en el parte policial que ella también disparó, pero a pesar de eso, varios sujetos huyeron a bordo de un jeep color verde.

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Ni las autoridades ni los dueños de la vivienda detallaron qué se robaron los sujetos, pero los moradores del sector reportaron en redes sociales que se habían escuchado doce disparos y que los sujetos eran buscados por aire y tierra por las autoridades.

Ese mismo día, varias familias que retornaban de los balnearios a sus viviendas en una urbanización ubicada en el kilómetro 14,5 de la vía a la costa se llevaron una sorpresa al encontrar sus cosas revueltas.

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Televisores, joyas, computadoras, dinero y hasta herramientas fueron sustraídos de tres viviendas, detalló Christian Vélez, quien vive en esa urbanización desde hace 9 años.

A dos casas de la suya, Fanny C. también perdió varios artefactos de su hogar debido a la visita de los ladrones, que se presume habrían ingresado por la parte posterior de la urbanización, que limita con un terreno baldío.

Ambos colocaron las denuncias en la Fiscalía y los agentes llegaron a su casa a recopilar evidencias, pero en el hogar de los Vélez aún se ven las huellas de lodo en el piso y en las paredes que habrían escalado.

Otro morador, que prefirió no poner la denuncia, contó que a su casa ingresaron pero él y su familia sí se encontraban.

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La víctima dijo que tras escuchar un grito de su hija bajó a averiguar qué pasaba y se encontró con varios sujetos en la sala de su casa, pero todo estaba oscuro. Ellos huyeron y antes habrían intentado disparar pero se les encasquilló el arma, contó el morador. (I)