En condiciones de hacinamiento, insalubridad, sin ventilación adecuada, sin agua ni alimento y con el riesgo de deshidratación y asfixia se rescató a 301 migrantes hallados dentro de tráileres en los estados mexicanos de Tamaulipas y Veracruz entre el viernes y sábado pasados.

El grupo incluía a inmigrantes procedentes, la mayoría, de Honduras, Guatemala y El Salvador, y entre ellos a 97 menores de edad, 24 de ellos viajaban solos.

El rescate masivo de inmigrantes que intentan ingresar clandestinamente a EE.UU. se suma a otros 174 centroamericanos rescatados en dos operativos en Coahuila y Tamaulipas, publicó AFP.

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El pasado 22 de enero, 12 inmigrantes fueron descubiertos tras haber sido secuestrados en el estado de Querétaro; el 25 de enero, en Tamaulipas, 109 personas fueron halladas en un tráiler, 39 eran menores de edad; el 27 de enero, 65 fueron encontrados en un camión, entre ellos 22 menores, en Coahuila, ambos estados son fronterizos con EE.UU. El 29 de enero, otro grupo de 76 personas fue descubierto en un camión en Texas, EE.UU., entre ellos 13 menores de edad que viajaban solos.

La política migratoria del presidente estadounidense Donald Trump ha agitado el movimiento en los estados mexicanos, en particular en los fronterizos con EE.UU., en donde el miedo a la insistencia de la construcción de un muro en la frontera ha provocado un efecto llamada a inmigrantes centroamericanos y de Sudamérica.

Más de 500.000 personas cruzan irregularmente la frontera sur de México cada año, según datos de Naciones Unidas. En su recorrido son víctimas de abusos por parte de criminales y traficantes de personas, publicó AFP.

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Amnistía Internacional denunció que autoridades migratorias de México deportan ilegalmente a miles de centroamericanos sin considerar los riesgos letales que corren en sus países de origen por las bandas criminales y la falta de oportunidades.

Según la ONG, de 500 migrantes entrevistados, el 75% no fue informado de su derecho a pedir asilo.

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El ambiente también se agita en EE.UU., en donde los inmigrantes están a la expectativa sobre el futuro de una reforma migratoria que se negocia contra reloj en el Congreso, de la que depende el futuro de 800 mil jóvenes dreamers, que llegaron a EE.UU. siendo niños y que podrían ser deportados si se cumple la anulación del programa DACA que los protege.

Otros cientos de inmigrantes acuden a oficinas gubernamentales con el fin de obtener la residencia estadounidense, un largo trámite, cuyo tiempo de espera para conseguir la ciudadanía se ha duplicado, publicó univision.com. El año pasado había 630.000 inmigrantes en lista de espera. (I)

500
Personas cruzan México cada año en su ruta a EE.UU.