El anuncio de la elección presidencial de Venezuela causó sorpresa y dudas, más con la anulación en la carrera a varios actores políticos como la coalición opositora MUD y al partido de Leopoldo López, Voluntad Popular.

Por esta última razón, líderes opositores pidieron a sus seguidores salir el fin de semana a reinscribir a dos de sus principales partidos.

La oficialista Asamblea Constituyente impulsada por Maduro, que rige desde agosto como poder absoluto en el país, adelantó las presidenciales, habitualmente realizadas en diciembre, para el 30 de abril a más tardar. El Poder Electoral fijará la fecha exacta.

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Mientras, Maduro arrancó la campaña por su reelección en la víspera, aunque el país atraviesa una de sus peores crisis, con una inflación estimada por el FMI en un estratosférico 13.000% para 2018 y una grave escasez de alimentos y medicinas. El FMI proyecta también una caída 15% de la economía.

La situación actual han causado que miles de venezolanos dejen su tierra para buscar un futuro mejor y ayudar a los que se quedan. Según BBC Mundo, varios miles escogen el cono sur para emigrar. Y cuatro de ellos, que viven en Ecuador, dieron su opinión a este Diario sobre las elecciones.

Andrew Castro es uno, vive en Guayaquil desde hace dos años y dice que estos comicios son una “jugada del gobierno” de Maduro porque “hay más de 4 millones de venezolanos en el exterior, eso representa un porcentaje considerable si pudieran votar, pero muchos están irregulares en los países”.

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Agrega que también están los que no han hecho el registro consular, no tienen pasaporte por falta de material, entre otras cosas, que son requisito para tener un estatus migratorio legal y poder sufragar. Y además porque “el registro electoral no ha sido activado desde el 2012 en el exterior”.

Jangs Mujica tiene un año en el Puerto Principal. Ella considera el proceso electoral “viciado y fraudulento”: “Un pobre intento por disfrazar de ‘democracia’ lo que está sucediendo.

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Hace un año también llegó Reinaldo Matheus a Guayaquil desde Barquisimeto. Piensa que los comicios son una decisión basada en el temor que tiene el régimen, en parte, del voto extranjero –que calcula en “5 millones”– y de los nuevos votantes: “Si se ve el rango de edades que tuvieron la valentía de tomar acciones de calle, son personas que algunos ni siquiera tenían los 18 años”.

Mientras, Dioselyn Ramírez, quien arribó a Quito hace un mes desde Carabobo, piensa que las elecciones “no son más que otra burla, engaño, trampa y traición de los que están en el poder”.

Incluso algunos venezolanos en las redes sociales han dicho que tras las elecciones se produciría más migración. Entre ellos Luis Oliveros, articulista del diario El Nacional: “En mayo podría ocurrir la crisis migratoria más grande en la historia de esta región (...), se podría consolidar el camino venezolano a ser la nueva Eritrea mundial...”, escribió en Twitter.

Analistas y líderes opositores alertaban antes sobre el posible adelanto de las elecciones para buscar aprovechar las fracturas en la oposición.

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Varios países como EE.UU. y Argentina dijeron que no avalarían la elección. (I)

(...) la mayoría de venezolanos en el exterior no va a poder votar porque es poco tiempo. Aparte, el registro electoral no ha sido activado desde el 2012 en el exterior”.Andrew Castro, Migrante venezolano en Ecuador.