La Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) mostró este martes 23, su preocupación por los más de mil desplazados reportados en enero en Colombia, un aumento "importante" respecto al mismo mes del año anterior, según alertó.

En "enero de 2018 se han visto obligadas a desplazarse más de 1.000 personas lo que implicaría un incremento importante respecto a los mismos hechos en el mes de enero de 2017, cuando más de 230 personas fueron desplazadas en eventos masivos", indicó el organismo en un comunicado.

ACNUR se refirió a los hechos denunciados el lunes por la Defensoría del Pueblo (ombudsman), en los que registró el desplazamiento de más de mil personas en distintas regiones del país por enfrentamientos y amenazas de varios grupos armados en apenas cuatro días.

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"En estas zonas las poblaciones se ven afectadas no solo por el desplazamiento forzado sino que muchas veces son confinadas en sus propios territorios, quedando sin acceso a actividades básicas de subsistencia", explicó el organismo internacional.

La agencia sostuvo que estas comunidades están en "grave situación de riesgo" por vivir en lugares en disputa entre actores armados como la guerrilla ELN, disidencias de las FARC y las Autodefensas Gaitanistas de Colombia, una organización narco de origen paramilitar.

"Es urgente tomar medidas que garanticen de manera permanente la seguridad de estas poblaciones, campesinas, indígenas y afrocolombianas", agregó ACNUR, que abogó por una presencia "integral" del Estado en estas áreas.

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Con 7,4 millones de desplazados, Colombia es el país que presenta cifras más elevadas en el mundo en ese rubro, seguido de Siria, con 6,3 millones, e Irak, con 3,6 millones, según ACNUR.

El guevarista Ejército de Liberación Nacional (ELN) y el gobierno de Juan Manuel Santos negocian para superar un conflicto armado de medio siglo, aunque las pláticas instaladas en febrero en Quito están suspendidas tras una ofensiva rebelde al término de una tregua bilateral de tres meses.

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Santos busca un pacto similar al firmado a finales de 2016 con las otras poderosas FARC, ya desarmadas y transformadas en partido político. (I)