El activista Fernando Villavicencio, quien se encontraba en Perú en busca de un asilo político, denunció desde Quito que la intermediación petrolera en Ecuador ha causado perjuicio al Estado por más de 2.200 millones de dólares.

Acompañado por Ramiro García Falconí, presidente del directorio del Colegio de Abogados de Pichincha, Villavicencio reiteró las supuestas irregularidades en la negociación petrolera con Petrochina.

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Todo se hizo a través de compañías offshore, por ejemplo Petrochina América constituida en Panamá. Fiscalía debe investigar quiénes están tras la compañías que se llevaron esos dineros, expresaron ambos; los documentos con los nombres de quienes fueron los apoderados están a disposición de la Fiscalía, dijeron.

Es una denuncia de 105 páginas que ya se envió a entregar a la Fiscalía, dijo Villavicencio, quien aseguró que el expresidente Rafael Correa sabía que el petróleo no llegaba directamente a sus compradores.

Recordó que en un documento la exministra de Finanzas de Correa, María Elsa Viteri, expresó que "permitir que China venda nuestro petróleo es entregarle una enorme ganancia a Petrochina".

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Para García, la presencia de Villavicencio, quien tiene orden de prisión, implica una enorme dosis de valentía para denunciar ante la actual presidencia de Ecuador sobre la millonaria intermediación.

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Sobre su retorno al país, Villavicencio dijo que "si Ecuador empieza a cambiar tiene que cambiar en la práctica, vengo a probar si es cierto que hemos recuperado la justicia, capacidad de libertad de expresión, vengo a probar que los corruptos van a la cárcel". (I)