Julio Arévalo Rivera, exjuez quinto de lo Civil del Guayas, fue destituido de su cargo en octubre del 2013 y luego fue sentenciado a 17 meses de cárcel por cometer supuestos actos de corrupción en el remate de bienes que llegaron a su despacho. Sostiene que estas acciones fueron un “show mediático” que buscó infundir “temor” a los jueces.

En 2013, mediante rueda de prensa, Gustavo Jalkh afirmó que usted fue detenido por cometer “acciones delictuosas” y beneficiarse de su condición de juez, ¿fue cierto?

El 16 de octubre de 2013 cuando yo salía de una diligencia me llevaron a los calabozos de la Policía Judicial... no sabía de qué se me acusaba, estuve incomunicado..., todo el mundo callaba. Ese mismo día Jalkh, presidente del Consejo de la Judicatura, señaló que me beneficié de remates que se realizaron en mi despacho lo cual fue un hecho falso y comprobado por los peritajes que se encuentran en el proceso, pero lo más increíble es que al siguiente día me inician un proceso penal por algo totalmente diferente.

Publicidad

¿De qué se lo acusó?

Le buscaron la quinta pata al gato... porque en la instrucción fiscal demuestro que toda la documentación en mi contra era desactualizada... Julio Aguayo Avilés, que en esa época era presidente de la Corte Provincial del Guayas, se aparta de la versión de la Fiscalía, pero me llama a juicio porque al comprar y vender mis propiedades lo hice sin tener la licencia de corredor inmobiliario y con esto me encuadra por el delito de lavado de activos. Cualquier juez que me hubiese declarado inocente, Jalkh hubiese ordenado su destitución... los jueces tienen miedo de fallar contra él, pero es necesario que la ciudadanía conozca la verdad.

Usted dice que su destitución y posterior encarcelamiento fue una estrategia...

Publicidad

Todo fue parte de un gran show publicitario del Consejo de la Judicatura y del ministerio del Interior, dirigido por José Serrano, que tenía como fin, al ver lo que pasó conmigo, intimidar a los jueces y les salió muy bien porque a partir de octubre del 2013 Jalkh comenzó a mandar y dominar en la función Judicial. Pasé 17 meses sin sentencia... en el octavo mes el fiscal Paúl Ponce me propuso que me declare culpable para resolver el caso, pero no acepté y por eso me mantuvieron los 17 meses preso. Luego como ya no tenían razones para mi detención, me sentencian a 17 meses de cárcel y como ya había cumplido la pena salí en libertad. (I)