Los visitantes de la rueda moscovita de Londres se quedaron varados durante más de tres horas, cuando la atracción se detuvo inesperadamente, indicó este domingo la compañía que opera la noria.

El viaje en una de las cápsulas de vidrio de la rueda por lo general tarda 30 minutos, pero los pasajeros el sábado tuvieron mucho más tiempo para disfrutar de las vistas de la noche de Londres, debido a un fallo técnico.

"Ayer por la tarde el London Eye se detuvo temporalmente para investigar un problema técnico a las 19:21. Nuestro equipo fue inmediatamente a la escena para evaluar el problema y ayudar a salir a los huéspedes del London Eye. Todos los pasajeros fueron desembarcados de manera segura a las 22:40 y atendidos por personal", indicó un portavoz de la compañía a la AFP.

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La empresa agregó que los visitantes no estaban en riesgo y que iban a recibir un reembolso.

Un pasajero dijo al periódico Evening Standard que estaba en una cápsula en la parte superior de la rueda de la fortuna cuando ocurrió la parada.

"Al principio todos se reían, pero al pasar el tiempo la gente empezó a sentir ansiedad", indicó Adil Raja al medio británico. "Había 22 personas en nuestra capsula, pero solo cinco o seis mantas de emergencia, botellas de agua y pastillas de glucosa (...) No teníamos comida y hacía mucho frío", agregó.

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El Ojo de Londres reabrió este domingo una hora más tarde de lo habitual.

La atracción, de 135 metros de altura y 32 cápsulas, se abrió al público el 9 de marzo de 2000, y rápidamente se convirtió en uno de los lugares más conocidos de la capital británica. (I)