El presidente venezolano, Nicolás Maduro, criticó ayer a la OEA (Organización de Estados Americanos) y pidió a sus colegas de EE.UU., Barack Obama, y Colombia, Juan Manuel Santos, apuntalar el plan de salud visual de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), y reveló que espera de que el papa Francisco haga lo propio.

“Le he propuesto al papa Francisco, y le propongo a Obama también (...), ahora que ha dado pasos importantes de respeto a nuestra hermana Cuba, y mientras levanta el bloqueo y regresa Guantánamo”, fortalecer la Misión Milagro, dijo y aseguró que en diez años ese plan de salud operó gratis a cuatro millones de personas.

Con el apoyo de Colombia, EE.UU. y del Vaticano, el plan de la ALBA se fortalecería y podría “ir a sanar y devolverle la vista a otros cuatro, seis o siete millones de hombres y mujeres que están esperando en América Latina y en el Caribe”, dijo en un acto televisado.(I)