Los representantes de varias centrales sindicales y de organizaciones indígenas del país, que se reunieron en su cuarta convención este sábado en el Teatro Quito, anunciaron que para el próximo 19 de marzo se realizará ​una primera gran marcha nacional.

Además, para el 5 y 6 de marzo previos se realizará la cumbre de los pueblos, nacionalidades y organizaciones sociales del país. En esta cita se definirán las acciones para la marcha del 1 de mayo, donde se conmemora el Día Internacional del Trabajo.

La decisión fue adoptada por alrededor de 700 delegados, entre los que se cuentan organizaciones de trabajadores agrupadas en el FUT, la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), el Frente Popular, la Federación Médica, entre otras.​

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La decisión pendiente es una huelga nacional, un levantamiento o un paro del pueblo, o un levantamiento campesino indígena y popular que cerrarían el primer semestre del 2015.

Estas acciones son parte de una plataforma de lucha que se viene diseñando desde el año pasado y en donde se incluyen entre otros temas: Las enmiendas a la Constitución, las leyes de Aguas y Tierras, las reformas al Código Laboral, la defensa del edificio donde trabaja la Conaie y que deberán desalojar por disposición ministerial, entre otros.

Mesías Tatamuez, presidente nacional de la Cedocut y parte del FUT, llamó a un diálogo nacional tripartito, donde el Gobierno, empleadores y los trabajadores se sienten a hacer las leyes, "eso ayudaría mucho, pero para que ello ocurra el régimen tendría que cambiar de actitud porque siempre nos trata mal, nos dice que las marchas son para que exista un muerto y eso no es cierto".

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Mientras José Villavicencia, presidente de la UGTE, cuestionó las enmiendas a la Constitución porque, según dijo, "violentan derechos individuales y colectivos de los trabajadores del pueblo y eso que hace que estemos en estas convención nacional, para definir las acciones a seguir en este año". (I)