Varias personas resultaron heridas en las últimas horas en el norte de España a causa del temporal en el Atlántico, que afecta también a otros países.

Una mujer perdió parte de dos dedos de una mano cuando estaba asegurando con una cuerda una estructura en la localidad de Cangas de Onís (Asturias) y otra resultó herida leve en la cabeza tras desprenderse parte de una fachada de un edificio de Oviedo (capital asturiana) a causa del fuerte temporal de viento.

También, una operadora de cámara de un canal de televisión resultó este miércoles herida, con un fuerte traumatismo en la zona lumbar y en el brazo, tras ser arrastrada por una ola en la ciudad de San Sebastián (País Vasco), informaron testigos presenciales.

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La víctima se encontraba grabando el temporal marítimo cuando una gran ola ha saltado por encima de la escollera y se adentró en el paseo de la ciudad, arrastrando a varias personas.

Un hombre en La Coruña (Galicia, noroeste) resultó herido por el impacto de un trozo de fachada que penetró por la ventana de su casa.

Sucesivas borrascas, acompañadas de frentes fríos, seguirán afectando a la Península Ibérica, en especial en la zona norte, en lo que resta de semana y durante toda la siguiente, con un temporal de viento, que este miércoles ha complicado el tráfico también en vías de Lérida y Gerona (Cataluña, noreste).

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Una boya oceanográfica de la Universidad de Oviedo registró el sábado una ola de casi 21 metros de altura.

La alerta roja decretada para el litoral de Galicia ha impedido que salieran al mar los medios de Salvamento Marítimo que han estado buscando a un joven de 15 años, engullido por las olas el pasado domingo en el municipio de Foz, aunque no se descarta que si mejora el tiempo se retomen las labores de búsqueda.

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A partir de este jueves, una nueva borrasca atlántica próxima a las costas de Galicia, dará lugar a un nuevo temporal con vientos fuertes o muy fuertes en el norte del país.

Carguero zozobra frente a costa francesa

El fuerte oleaje provocado este miércoles por el temporal en aguas del Atlántico partió en dos el carguero español "Luno" cuando trataba de entrar en el puerto francés de Bayona, a la altura de Anglet, lo que obligó al rescate de sus doce ocupantes por un helicóptero.

Las autoridades francesas descartaron un riesgo de contaminación importante, porque el barco, dedicado al transporte de contenedores, estaba vacío, y solo se teme que se puedan escapar las entorno a 80 toneladas de combustible que había en sus depósitos.

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Tras haber aguardado varias horas frente a Anglet a que saliera otro barco, el buque español se disponía a entrar en el puerto de Bayona, en el suroeste de Francia, remolcado y pilotado, cuando sufrió una avería eléctrica que inutilizó sus mandos.

Incontrolable, el carguero chocó contra un espigón del puerto y se fracturó en dos partes. La delantera se hundió en la playa de Anglet, mientras que la otra permanece varada junto al espigón.