Ya suman tres personas las fallecidas el pasado martes por el consumo de licor adulterado en diferentes ciudades, mientras que tres más permanecen hospitalizadas con signos de intoxicación. Luego de esto, autoridades emprendieron operativos de control en los que decomisaron alcohol presuntamente adulterado.

A la muerte de Walter Benabídez Tepán, de 26 años, en Cuenca, por ingerir alcohol adulterado con metanol, según la autopsia que se le practicó, se suman la de Óscar Guaranga, de 27 y Teodoro Morales, de 49, en Riobamba.

Guaranga, oriundo de la parroquia San Luis, ingresó el lunes al hospital General Docente Riobamba con síntomas de intoxicación. Luego de los exámenes se determinó un grado positivo por ingerir alcohol metílico y a las 04:00 del martes murió.

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Morales, originario de la parroquia Licto, también de Riobamba, con los mismos síntomas ingresó a ese hospital y falleció a las 19:00 de ese día.

El metanol es un alcohol industrial y su mezcla con trago artesanal y vinos provocó en el país 52 muertos y unos 300 afectados en el 2011. Al siguiente año se registraron 3 decesos y 10 intoxicados, todos estos casos se produjeron por el consumo del licor adulterado durante una fiesta en Cuenca.

En tanto, José Ortíz, ambateño de 28 años, luego de recibir los primeros auxilios en una clínica particular de Riobamba, la mañana del martes, por ingerir alcohol metílico según los resultados de los exámenes, fue ingresado al Hospital Docente y más tarde trasladado al Hospital General de Ambato, donde se encuentra en el área de terapia intensiva, informó Edison Cepeda, director de la primera casa de salud mencionada.

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Patricia Cisneros, esposa de Ortiz, manifestó que este junto con otros cuatro amigos habrían consumido licor la tarde del lunes, pero que él sintió mareo al día siguiente, “Se sentía mal luego de todo un día de haber descansado, pero no sabíamos qué era”, contó.

Afirmó que desconocía en dónde compraron el licor, pero que su cónyuge al momento que se encontraba consciente le dijo que habían tomado un puro mezclado con una bebida gaseosa.

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Con similares síntomas de intoxicación por ingerir alcohol adulterado en un centro nocturno de Riobamba se encuentra en tratamiento en el Hospital Docente, Miguel Paguay, de 34 años y morador de la ciudadela Sixto Durán-Ballén.

También en Cuenca hay un paciente de 70 años en el hospital del Seguro Social ingresado por intoxicación alcohólica, que se mantiene en vigilancia médica. Hasta la tarde de ayer se desconocían los resultados de los exámenes que le realizaron para determinar si habría ingerido alcohol metílico. Su situación es estable.

Mientras, en el operativo de control realizado el miércoles en Riobamba se incautaron 1.800 litros de licor presuntamente adulterados que estaban almacenados en nueve canecas de PVC que contenían alrededor de 200 litros cada una.

Leonardo Bonifaz, funcionario del Ministerio de Salud de Chimborazo, comentó que según las primeras muestras tomadas el licor no sería apto para su expendio y peor aún para el consumo humano.

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En Cuenca, en un año, cerca de 300 locales de venta de alcohol fueron clausurados por no presentar registro sanitario. Por lo menos el 15% de ellos fueron relacionados con la venta de alcohol metílico, señaló Jorge Cabrera, intendente de Policía de Azuay.

Pese a los operativos de la Intendencia sigue el comercio de alcohol en lugares camuflados como tiendas de frutas o parqueaderos que ya están identificados por las autoridades. Estas cantinas disfrazadas están en la parte posterior del Arenal, sector de la 9 de Octubre, Fátima, Turi y otras localidades. Además los cantones que son la fuente del licor son Santa Isabel, Girón, Gualaceo y Paute.

Marco Freire, director provincial del Salud del Azuay, manifestó que inspeccionarán los lugares sospechosos.

Riobamba-Ambato-Cuenca