La prevención de accidentes de tránsito requiere de una atención integral por parte de los conductores. Los aspectos técnicos son revelantes, pero también la parte humana como las aptitudes del conductor, estilos y técnicas de conducción.

“Cada persona cuenta con una manera de conducir, lo que se conoce como estilo de conducción, refiriéndose a su comportamiento y hábitos. Es importante aplicar procedimientos o técnicas que brindarán mayor seguridad al momento de conducir. Con esto se aprovecha de mejor manera las características del vehículo y se puede obtener beneficios como ahorro del 10% en el consumo de combustible”, explica William Herrera, Instructor de Teojama Comercial.

Tipos de conducción

Conducción deportiva: Este tipo de conducción se aplica en condiciones extremas, es decir, cuando el vehículo transita por caminos irregulares, incluyendo altas velocidades, rutas complejas y factores del terreno. Esta solo puede ser llevada a cabo dentro de circuitos especiales, ya que puede generar accidentes de tránsito. Además, algunas de las técnicas del manejo deportivo se encuentran en contra de las normas de tránsito.

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Conducción 4x4: Este tipo de conducción es característico de vehículos de tracción en las cuatro llantas, permitiendo que se aferran a terrenos que carecen de agarre como lo es el lodo, nieve o arena. Por este motivo, se recomienda que el manejo de estos vehículos solo se realicen en terrenos con estas características, ya que no tendrá un buen desempeño en otro tipo de suelos.

Conducción preventiva: Este tipo de conducción se centra en mantener la atención en los imprevistos que podrían presentarse en la vía. Una de las características principales es la observación del entorno en el que se conduce, manteniendo una distancia prudente entre vehículos u objetos. Otorga la posibilidad de reaccionar de manera rápida al presentarse un siniestro.

Conducción defensiva: La conducción defensiva tiene como objetivo identificar todo los posibles accidentes que pueden generarse al conducir, sin necesidad que estos lleguen a pasar.

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Técnicas de conducción

Arranque del motor y puesta en marcha del vehículo de manera apropiada: La manera adecuada es arrancar sin pisar el acelerador y dejarlo funcionar unos minutos hasta que empiece a marcar el indicador de temperatura.

Aceleración suave y progresiva, sobre todo en las salidas y cuando el motor aún esté frío hasta que alcance su temperatura óptima de funcionamiento.

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Realizar los cambios de marcha cuando existe libertad de circulación.

Conducir a una velocidad moderada, evitar frenadas y aceleraciones innecesarias.

No pisar el acelerador cuando no sea necesario, así no existe consumo de combustible.

Evitar frenar bruscamente y cuando sea necesario desacelerar, levantaremos el pie del acelerador y aprovecharemos la inercia del vehículo lo máximo posible, y utilizar el freno de motor, frenos auxiliares juntamente con el freno de servicio.

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Apagar el motor en detenciones prolongadas, superiores a tres minutos; los más recomendable es dejar el motor apagado.

Evitar sobrecargar al vehículo: cuando existe sobrecarga se genera mayor consumo de combustible.

Planificar con antelación las rutas de recorrido para prevenir las condiciones de tráfico y anticiparse a las interrupciones de tráfico.

Aspectos de seguridad

  • Mantener una distancia de 3 a 4 metros con el vehículo que se encuentra al frente.
  • Analizar el tipo de calzada por el que se va a movilizar para identificar posibles maniobras.
  • Revisar los retrovisores antes de emprender un viaje y evitar manipularlos mientras el auto se encuentra en movimiento.
  • Mantenerse atento a los puntos ciegos presentes en los vehículos, se recomienda identificar cuáles son estos según el modelo y tipo de vehículo.
  • Usar las direccionales o señalética necesaria al realizar maniobras.(I)