Fueron 27.225 kilos de desperdicio plástico que se transformaron en 24.750 kilos de polietileno reciclado, es decir, en forma de pélets. Este material salió del país el pasado viernes hacia Bolivia, cuyo finalidad es ser convertido en fundas de acarreo y tipo camiseta.

Juan Carlos Luzuriaga, subgerente de Recycle, menciona que el material exportado es un plástico 100% post consumo que proviene de la calle.

“Sin duda es muy pro ambiente, pues estamos hablando de millones de fundas plásticas, que pasaron por un riguroso proceso bajo estándares de calidad”, señala Luzuriaga.

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Esta exportación salió desde Guayaquil por vía marítima hacia Chile. Luego, será transportada, vía terrestre, hacia Bolivia. Prevé llegar el próximo 5 de noviembre.

Recycle es una empresa ecuatoriana que desde hace tres años ha reciclado 200 toneladas de plástico post consumo. Ellos convierten los residuos nuevamente en materia prima para que otras compañías creen sus productos.

“Este es un esfuerzo humano que comienza con los recicladores, quienes llevan este material a los centros de acopio donde se hace un pre clasificado. Luego este plástico llega a la planta donde se la lava, se seca, se quitan etiquetas y dentro de una máquina especializada se lo funde. Después se lo filtra, se le da algo de color y se lo aditiva para mejorar sus propiedades mecánicas y que quede listo para ser procesado”, explica Luzuriaga.

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El producto exportado fue envasado en sacos de 25 kilos para que su cliente, en Bolivia, lo puedan mezclar, aditivar y finalmente convertirlo en fundas tipo camiseta, sustituyendo así el plástico virgen entre un 20 % a 40 %.

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En este proceso de transformación y exportación, según Recycle, han participado cerca de 45 trabajadores directos y más de 100 indirectos entre proveedores, clasificadores, lavadores y demás.

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En Ecuador, la tasa actual de recolección de polietileno o fundas de uso común es muy baja, esto es, un 15 %. A la par están otros productos como las botellas plásticas.

“Como consumidores podríamos aportar a mejorar este proceso si dedicamos un tiempo a separar de manera correcta los desperdicios y no mezclarlo todo en una sola funda de basura. Así las personas podrían tener un producto de mejor calidad, con más volumen y de esta forma podrían mejorar sus ingresos y estilo de vida, emprender y crecer. Eso se traduciría finalmente en que se pueda reciclar más y que haya una mejor disposición de los plásticos y no terminen en las calles o en los mares contaminando el ambiente”, enfatiza Luzuriaga.

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La empresa ecuatoriana Recycle espera continuar con estas exportaciones de polietileno, un tipo de plástico con el cual se realizan las fundas camiseta, gavetas, fundas de mercado, entre otros.

Este es un material que permite ser reciclado más de 100 veces por su estructura y facilidad de ser procesado, de acuerdo a Luzuriaga. (I)

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