El éxito suele asociarse con el poder, con las posesiones, con el placer, pero esas pueden ser solo algunas fracciones de lo que significa triunfar. En esa sensación de plenitud también se involucran el desarrollo y crecimiento personal, la armonía espiritual, el potenciar las habilidades y capacidades individuales. Aquella reflexión fue uno de los pensamientos que inspiraron la temática de la primera edición de la serie de conferencias TEDx, que tuvieron lugar el martes 29 de octubre en el auditorio de la Universidad Casa Grande y que se titularon ‘Beyond Success’ (Más allá del éxito). 

“‘Beyond Success’ nace de una sugerencia del consejo universitario, encabezado por Marcia Gilbert, fundadora de la universidad, junto con quien, profundizando en posibles temáticas, se decidió que el evento hablara sobre el éxito. Hubo una investigación para establecer cuáles son los problemas alrededor de esa falta de conocimiento de lo que significa el éxito o el limitado entendimiento que tiene la sociedad sobre lo que llamamos éxito”, explica Rafael Silva, estudiante del último año de Ciencias Políticas, quien tomó la iniciativa en la ejecución del evento TEDx como su proyecto de aplicación profesional (aplicó vía internet al proceso de solicitud para obtener la licencia y se la concedieron después de un mes, entre varias entrevistas).

“Se espera que cada año se renueven y nazcan nuevas ediciones con una temática diferente, con nuevos speakers, con más historias, y lo más interesante es que lo seguirán realizando estudiantes que estarán en la misma posición en la que estoy  yo actualmente, por salir de la universidad”. 

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El equipo organizador de este año estuvo integrado por diez estudiantes en total, de distintas facultades de la universidad, más cuatro asesores académicos. “Nos dieron directrices para que las conferencias sean ejecutadas de la manera más acertada y establecer puntos base que sirvan de guía para cumplir las expectativas del evento, que tenga su fundamento académico, el sentido de comunidad y aportar desde Ecuador historias que nutran a otros y realicen un aporte importante”. 

Los conferenciantes

Ninguna de sus historias se asemejó a la del otro. Lo que unió a ese grupo de conferenciantes esa noche fue que su definición personal del triunfo trasciende a la faceta que la sociedad conoce sobre cada uno de ellos. “Queríamos un abanico amplio de speakers, que no representen el éxito de manera tradicional”, comenta Silva. “Queríamos que compartan sus experiencias y que resulten útiles para quienes las escuchan. Este es un espacio para democratizar el conocimiento”. 

Así, los cinco invitados fueron Gustavo Manrique, presidente ejecutivo de Sambito (compañía enfocada en soluciones ambientales); la empresaria Yanin Torbay; Carlos Benavides, diseñador e ilustrador gráfico (@benatoons); Lissette Arellano, CEO y cofundadora del espacio de trabajo Comadres Coworking, y el chef Édgar León, reconocido a nivel internacional, entre otras cosas, por su libro Sopas: la identidad del Ecuador. 

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Para Lissette Arellano, subir al escenario TEDx fue dar un paso fuera de su zona de confort (admite que su fuerte no es hablar en público), pero confía en que las mujeres que escucharon su intervención titulada ‘El verdadero empoderamiento’ también se hayan animado a sacudirse de su comodidad. “De pronto hay alguna mujer que piense que es difícil ser mamá y ser emprendedora, lo cual es bastante cierto, pero a lo mejor, escuchándome,  se anime a salir de esa burbuja en la que tal vez se siente segura”.

El mensaje del chef Édgar León (Loja), quien preparó hace algunos años una cena para Michelle Obama, ex primera dama de Estados Unidos, fue directo: “Vengo a contarles que cuando uno tiene claro el objetivo y se es honesto con uno mismo, los premios y el éxito llegan. Aprendí a copiar menos de las cocinas del mundo y a enorgullecerme más por lo que soy, ecuatoriano”. 

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Carlos Benavides (Bena), quien en junio de este año formalizó un contrato como proveedor de contenido artístico para Walt Disney Company y todas sus filiales, alentó a los asistentes a no dejar que su capacidad de imaginar, que es tan fuerte durante la infancia, se diluya. “Nos volvemos tan realistas en nuestras vidas que llegamos a pensar que no lograremos realizar hasta las cosas más sencillas”, dijo. “Llegar hasta aquí ha sido un proceso de paciencia y dedicación, no para llegar a que me entrevisten ni nada de eso, sino porque es algo que me gusta, que me apasiona. Esa historia es la que comparto con mis amigos,  mis alumnos y mis colegas”.

Más relatos inspiradores llegaron con Yanin Torbay, quien compartió su experiencia de reencontrarse con sus padres en Líbano, luego de ser enviada a Ecuador a los 2 años, y  Gustavo Manrique Miranda, con su conferencia ‘Cuando no hay viento, tienes que remar’.