Desde muy joven, Hans Behr Martínez estuvo vinculado a la escritura. Cuando estudiaba en el colegio Cristóbal Colón ya escribía y triunfaba en certámenes colegiales. En 1984, cuando tenía 22 años, fue escogido, junto con otros dos jóvenes, para representar al Ecuador en un encuentro literario que se realizó en Europa. Los otros dos jóvenes eran Ernesto Torres Terán y Maritza Cino Alvear. Los tres han continuado en la literatura y en la actualidad tienen una obra amplia y representativa. Pero en el 84, Hans no había publicado todavía su primer libro. En ese encuentro, según recuerda, conoció a personajes como Augusto Roa Bastos, que fueron una inspiración. Allí supo que, definitivamente, su camino era la literatura. Y abrigó, de forma permanente, la carrera de escritor.

Es autor también, entre otros títulos, de una novela que se ha convertido en un éxito de la literatura infantil ecuatoriana: Casita, casona, casuna".

Publicó su primera obra en 1986, cuando contaba con 24 años. Fue un libro de cuentos y se tituló Ojos de piquero. En 1994 su primera novela, Los senderos de Emaús, logró el Premio Nacional de Literatura de la Casa de la Cultura Ecuatoriana. En 2009 ganó el Premio Aurelio Espinosa Pólit por la novela Maratón. En 2012 triunfó en el Concurso Nacional de Literatura Ángel Felicísimo Rojas con la novela Las luces de la felicidad. Es autor también, entre otros títulos, de una novela que se ha convertido en un éxito de la literatura infantil ecuatoriana: Casita, casona, casuna. Su escritura se mueve en dos vertientes: una para público general y otra para público infantil. Sus libros para público infantil los han editado el Grupo Editorial Norma y el sello SM, en su colección El barco de vapor.

Su exitosa Casita, casona, casuna es casi el retrato de su vida familiar. En esta obra la niña protagonista se entera de que la familia va a vender la casa en la que han vivido toda la vida para irse a una urbanización cerrada. Ella decide llevar un diario con las vivencias en la casa y piensa que cuando sea grande juntará dinero y volverá a comprar esa vivienda, que tanto ama. Es una obra realmente hermosa. La familia de Hans hizo también este proceso de mudanza. Él se inspiró en su hija para escribir la obra. La protagonista de Casita, casona, casuna se llama María Alejandra, igual que su hija.

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Nacido en Guayaquil, en 1962, tecnólogo de alimentos por la Escuela Superior Politécnica del Litoral (Espol) y con estudios de literatura en la Universidad Técnica Particular de Loja, Hans es autor de 10 libros, entre cuentos y novelas. Antes dividía su tiempo entre la industria farmacéutica y la escritura. Ahora, entre la docencia, la dirección de la biblioteca del colegio Torremar y la escritura. Es, además, un apasionado de los deportes. En uno de sus libros toca este tema. Una bandada de pelícanos, que publicó en 2016, es una novela juvenil sobre el deporte que es pasión de multitudes: el fútbol. Y sobre la amistad, el esfuerzo personal y la solidaridad. Su apellido Behr es de ascendencia alemana. Hans mantiene varios proyectos de escritura, que próximamente verán la luz. (O)