Resulta que las células de la piel se olvidan de cuál es su función y dejan de secretar colágeno y otras proteínas. Lo han descubierto científicos del Instituto de Investigación Biomédica (IRB Barcelona) que han hallado rutas celulares y moleculares que se modifican con el paso del tiempo.

La investigación abre nuevas vías para desarrollar productos cosméticos, pero también medicamentos que mejoren la cicatrización.  (F)