‘Ya estábamos cansados; ahora hay paz y tranquilidad’: en zona de Bellavista se vive con mayor tranquilidad tras colocación de rejas y garitas en accesos

En la salida de su domicilio hacia su trabajo, un vecino fue secuestrado y llevado en su propia camioneta para sacar $ 20.000 de una entidad bancaria, y posteriormente lo condujeron otra vez a su vivienda para llevarse sus pertenencias en el mismo vehículo de su propiedad, que luego terminó siendo abandonado en otro sector.

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Tras ese episodio, ocurrido hace más de un año, el vecino quedó conmocionado y decidió marcharse del domicilio para habitar en otro barrio.

Los robos a transeúntes, los asaltos a vehículos —incluyendo accesorios—, el consumo de drogas en espacios públicos y además el secuestro de aquel vecino son parte de los eventos violentos que se venían registrando en los recientes años en una de las zonas de la ciudadela Bellavista.

Hasta hace algunos meses, al día se daban al menos cinco novedades, principalmente de asaltos y robos a transeúntes y vehículos, según vecinos. Ante esa situación, los moradores de una zona este de Bellavista, entre las calles Jorge Perrone, Juan León Mera y callejón 28 SO, se organizaron para promover medidas de seguridad que mejoren la situación de convivencia en la zona.

Lourdes Ladd, dirigente barrial de Bellavista, sector este, mencionó que con el vecino Germán Rodríguez se organizaron para recolectar firmas entre los residentes durante tres meses y se aliaron con otros grupos de habitantes para implementar planes de seguridad, que incluyen principalmente la puesta de cerramientos en tres accesos de la ciudadela. Unos 200 moradores se han adherido a esta cruzada por la seguridad.

Como resultado de los primeros planes, implementados desde agosto del presente año, el sector tiene tres puertas de acceso con puestos de vigilancia, dos de estas con garitas con turnos de guardias privados durante las 24 horas. Este fue el primer paso luego de realizar las gestiones con la Dirección de Justicia y Vigilancia municipal.

En estos dos puntos, que aún están en construcción, durante las 24 horas se ubican custodios que se encargan de controlar la entrada y salida de los automotores y peatones. Cada uno se debe identificar antes de su ingreso.

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“No tiene idea del cambio radical en la ciudadela: hay paz, los moradores salen a la calle a pasear con sus animales... El impacto ha sido notorio“, dijo Lourdes Ladd, presidente del comité barrial de Bellavista Este.

Hasta ahora, los resultados son los esperados, con ninguna novedad de seguridad de alta repercusión en el sector intervenido. Incluso, según dirigentes, el vecino que fue víctima del plagio ahora está en espera del avance de las mejoras de seguridad para retornar a su antiguo vecindario.

Por ahora, Ladd mencionó que han promovido que los moradores se adapten al nuevo sistema de control y protocolos de seguridad en los accesos. Por ejemplo, la acostumbrada circulación de vendedores ambulantes ahora se realiza únicamente cuando el vecino de un inmueble pida el ingreso específico a su vivienda para la entrega de un producto, y posteriormente se lo acompaña para que se retire y no deambule por la ciudadela.

Como parte de los planes de autogestión, en las recientes semanas, la directiva promovió dos bingos, además de recepción de aportes y donaciones voluntarias de los vecinos. En paralelo, también tiene tres chats comunitarios entre vecinos para mantener control de las acciones realizadas, y además con personal policial a fin de dar aviso ante cualquier novedad inusual.

Entre los vecinos también ya encaminan la colocación de reflectores para mejorar la iluminación en los accesos y además la instalación de nueve cámaras de seguridad a través de la empresa privada, y también gestionan con la Corporación para la Seguridad Ciudadana (CSCG) para poder implementar más herramientas de ese tipo en la ciudadela.

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“Queremos sobrevivir en el tiempo, más que nada que el Municipio nos respalde para poder sobrevivir en el tiempo”, señaló Ladd, quien además adelantó que se buscan implementar mejoras tecnológicas con el servicio de TAG para el acceso directo de los automóviles de vecinos.

Entre los vecinos indicaron que notan un cambio en sus actividades: antes tenían varias malas experiencias de atracos, y ahora pueden salir con mayor libertad a compartir espacios comunes y transitar por las vías interiores con tranquilidad.

Giovanna Romoleroux, vecina del sector, recordó que una madrugada, hace unos dos años, un antisocial se trepó e ingresó por el balcón de su casa para llevarse una consola de juegos y un teléfono celular que estaban en la sala. En otra ocasión, varios pares de zapatos desaparecieron cuando los dejaron en la zona exterior del inmueble durante la época de pandemia.

Asimismo, a una vecina de ella la asaltaron afuera de su casa: sujetos la amedrentaron cuando llegaba con su esposo y se le llevaron sus pertenencias. A otro allegado de aquella moradora se le llevaron la camioneta que había dejado estacionada afuera de una vivienda, contó Romoleroux, quien también sufrió anteriormente el robo de accesorios de su vehículo.

“Ya estábamos cansados; era horrible vivir en Bellavista. Ahora puedo salir, caminar, andar con el teléfono; me puedo sentar en el parque; mis hijos salen de noche a un gimnasio, solitos, sin miedo a que los puedan asaltar. Ahora hay paz y tranquilidad”, mencionó Romoleroux.

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Otra vecina con casi tres décadas en la zona, Ana Rodríguez, también mencionó que ahora gusta de poder salir a un parque de la zona para ejercitarse en máquinas biosaludables y además pasear a su perrita en las calles de la zona.

Mientras siguen las implementaciones y suma de esfuerzos con más apoyo del vecindario, por ahora, un grupo de vecinos da apoyo a los guardias en las horas pico para dar facilidad en el ingreso de los vecinos y visitantes. A favor de mejorar el ingreso, los automotores de los vecinos ahora portan stickers identificativos.

En cuanto a movilidad, el vecindario también espera que la Agencia de Tránsito y Movilidad (ATM) los pueda ayudar con la instalación de señalética de “Prohibido estacionar” y rompevelocidades en las cercanías de las garitas.

Entre los vecinos unidos en comités de esa zona de Bellavista también se han organizado para la restauración de una cancha en la zona superior y mejoras en un parque, que ya cuenta con máquinas biosaludables.

Otras zonas de Bellavista

En zonas cercanas a la avenida Velasco Ibarra, del mismo sector de Bellavista, varios vecinos y trabajadores de negocios mencionaron que se suelen dar robos recurrentes a transeúntes a manos de personas que llegan a pie o en motocicletas en horario matutino y nocturno.

Germán Sotomayor, guardia de seguridad de otro callejón, contó que sobre todo en las noches existen motorizados que se aprovechan de la soledad de las vías para amedrentar a personas que salen con sus teléfonos celulares al pie de un parque de la manzana 26, sobre la vía Guillermo Castro (calle A).

Días atrás, personal policial realizaba rondas en patrulleros a lo largo de la av. Velasco Ibarra, donde se ubica la Unidad de Policía Comunitaria, la cual fue atacada a bala. Adicionalmente, otro puesto policial estaba con sus puertas cerradas en la calle Juan León Mera y calle 2B SO. Allí se colocaron bancas y tachos metálicos para restringir el parqueo de automotores. (I)