Niñas y adolescentes con atuendos de guayaquileña, criolla bonita y bastoneras encabezaron el desfile cívico que se realizó la mañana de este lunes, 3 de octubre, en calles del suburbio en honor a los festejos por los 202 años de la independencia de Guayaquil.

El desfile se inició a las 09:30 en las calles Francisco Segura y la 19 con más de 500 personas, entre cuatro planteles educativos particulares y uno fiscal; adicionalmente, grupos de deportistas, practicantes de zumba, aeróbicos, bandas musicales, grupos de zanqueros y, además, de clubes de adultos mayores.

Los estudiantes de los planteles Stanford, San Vicente, Elim, Señor de la Buena Esperanza y la Unidad Educativa Fiscal Enrique Gil Gilbert realizaron presentaciones de grupos de bailes, bastoneras y bandas musicales.

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La calle Panamá, en el centro de Guayaquil, se iluminó con los colores celeste y blanco

María Teresa Flores acudió con sus familiares a ver a su hija Romina, de 6 años, que llevaba un atuendo de la guayaquileña de antaño y presidía el desfile de la Unidad Educativa Stanford.

“Es bueno para ellos que vivan la celebración de su ciudad, que sepan del civismo tan necesario en este tiempo. Me parece bien que no se pierdan estas tradiciones”, dijo la mujer mientras filmaba a su hija.

Vecinos del suburbio también se mostraron contentos; salieron de sus viviendas a ver el desfile.

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Uno de los grandes atractivos fue el espacio del pregón cívico estudiantil, en el cual participaron cinco planteles educativos. Foto: El Universo

“Acá ya ni salimos, por el temor a tanta delincuencia que se ve. Pero esto es bonito: ver a los niños desfilar; es un regalo para Guayaquil. Hasta a mi vecina la he visto a los años, porque aquí ya uno prefiere estar encerrado”, comentó Fernando León, residente de esa zona desde hace 50 años.

Personal de la Dirección de Educación y Acción Social (Dase) indicó que organizaron este desfile para devolver el civismo a los niños, adultos y adultos mayores, ya que en estas semanas hay temor por la situación que se vive en las escuelas.

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“La gente está asustada. Si me pongo a medir (la afluencia) de los otros desfiles, en este hay menos participación de personas; sin embargo, es la oportunidad de darle algo positivo a la ciudad. No podemos sumergirnos en el temor; así no podemos crecer como sociedad”, dijo Robinson Olvera, del CAMI de Cisne 2.

Durante el fin de semana, otros planteles realizaron actividades para dar inicio a los festejos octubrinos. El sábado, planteles de la Florida salieron a desfilar y aprovecharon para realizar un llamado a la paz.

Este lunes, en varias escuelas también comenzaron programas internos para incentivar el civismo y la importancia de esta fecha para Guayaquil. (I)