Los padres Emmanuel De Benzenac y Óscar Uribe Cuartas cumplieron 50 años de servicio pastoral en el país. En medio siglo, su vocación religiosa les ha permitido formar decenas de sacerdotes, guiar a jóvenes con la palabra de Dios y trabajar en zonas vulnerables en el territorio nacional.

Mientras se preparaba para oficiar una misa a las 18:30 el pasado jueves, De Benzenac rememoró su vida en Ecuador. Nació en Francia y llegó a Guayaquil en 1971, cuando tenía 25 años. Él pertenece a la congregación de los Sagrados Corazones.

El religioso contó que, en aquella época, se asentó sobre el sur de la ciudad, donde laboró en varias zonas. Por ejemplo, dijo, participó en la construcción de la iglesia parroquial ubicada en la ciudadela Huancavilca Sur.

Publicidad

Luego se trasladó hacia el Guasmo, cuando las primeras casas comenzaron a asentarse. “Venía mucha gente de las provincias que buscaba un lote de tierra. Entonces comenzamos también a levantar capillas de caña”, manifestó el religioso. Con los moradores de esos sectores, organizaban catequesis y misiones.

“Desde pequeño tenía esa misión de ayudar a las personas, era como una cosa impuesta”, narró.

En la urbe porteña se mantuvo durante trece años. En 1984, viajó a Quito para ser parte de un centro de formación para sacerdotes. También se dedicó a ayudar a sectores vulnerables del noroccidente de la capital ecuatoriana.

Publicidad

En el 2015, De Benzenac regresó a Guayaquil para hacerse cargo de la parroquia Cristo Libertador, que comprende cuatro templos en el oeste de la ciudad. Entre ellos, el que lleva el mismo nombre de la parroquia y la iglesia San Pedro, en la ciudadela Ferroviaria.

Designan nuevos obispos en provincias del norte de Ecuador

En estas parroquias desarrolla diversas actividades. Por ejemplo, contó que antes de la pandemia de COVID-19 realizaban actos en casas de feligreses. Se reunían en grupos y él acudía a los domicilios para leer un mensaje bíblico. Luego se suspendió por el coronavirus, pero esperan retomarlo pronto.

Publicidad

De Benzenac califica a los ecuatorianos como “gente luchadora, pacífica, que quiere salir adelante”. Indicó que su trabajo está enfocado en tratar de que las personas retomen su relación con Dios.

Padre Óscar Uribe Cuartas

El padre Óscar Uribe Cuartas también cumplió medio siglo al servicio de los ecuatorianos. El religioso, nacido en Colombia, fue ordenado como sacerdote el 28 de agosto de 1971 en Medellín.

Según una reseña de la Arquidiócesis de Guayaquil, Uribe contó que su familia fue una pieza clave para que se incline por el sacerdocio. Por ello, el religioso aconseja a los padres a fomentar la fe en los niños.

Publicidad

“Los padres deben avivar la fe de sus hijos, cumpliendo con el compromiso que hicieron cuando llevaron a bautizar a sus hijos, pues como sacerdotes nos damos cuenta de habernos criado en hogares que nos formaron en la fe”, refirió el religioso.

Su carrera pastoral se inició como ayudante en la diócesis de Sonsón - Rionegro, en Colombia. Fue nombrado formador en el seminario Cristo Sacerdote, en ese país.

Uribe llegó a Guayaquil en 1979, para participar en la formación de sacerdotes del Seminario Mayor. Se mantuvo laborando en esta dependencia hasta 1999.

Luego tomó a cargo la parroquia Niña María, en el norte de la urbe porteña. Desde el 2014 está encargado de la parroquia La Eucaristía, en Cerecita.

“Celebrar 50 años de vida sacerdotal es una ocasión para darle gracias a Dios por todos los dones que estos años he recibido de él. La vocación es un don de Dios y desde pequeño infundió en mi corazón el don de la vocación sacerdotal”, expresó Uribe. (I)