Perros pasan por entrenamientos de obediencia y de antinarcóticos hasta convertirse en equipos de trabajo junto con cuidadores

Un nuevo grupo de 13 perros se prepararon con adiestramiento básico, rescate y detección antidrogas en la Escuela Canina de la Infantería de Marina, en la base San Eduardo, en Guayaquil.

El capitán de navío Fernando Recalde, comandante de la Infantería de Marina, explicó que hay 10 canes ya amaestrados, 12 en proceso en un curso especializado en detección de drogas, además de Zeus, el perro en condición de abandono que adoptó el Municipio de Guayaquil y ahora ya se “gradúa” de un curso de adiestramiento básico en esta institución naval.

La Escuela de Infantería de Marina tiene un centro canino donde se capacita y entrena a los guías y canes en adiestramiento básico, rescate de víctimas y detección de estupefacientes; además, por la pandemia se ha entrenado a canes para detectar personas infectadas con COVID-19.

Recalde recordó que la Escuela de Guías de Canes fue creada en el año 2008 con el propósito de capacitar al personal y sus canes en la detección de estupefacientes. “Esto contribuye a ser más eficientes durante la ejecución de operaciones militares de defensa interna que ejecutan las FF. AA. en su ámbito legal, así como también en el apoyo a otras instituciones del Estado”, explicó.

Añadió que cuando los canes terminan el proceso de entrenamiento son llevados a unidades fronterizas del norte y sur del país, así como también en el litoral de Esmeraldas y Manabí, donde hay una alta probabilidad de que la amenaza del narcotráfico esté presente. “Además, han sido utilizados en los archipiélagos de Ancón de Sardinas, Jambelí y el golfo de Guayaquil, permitiendo un mejor registro durante el control de las embarcaciones fluviales y buques mercantes en los espacios acuáticos nacionales“, comentó el comandante Recalde.

El suboficial Julio Misquiro, jefe de los entrenadores de canes, explicó que el adiestramiento de los perros empieza con lo básico: comportamiento, posiciones fundamentales y distinción de olores.

Asimismo, recalcaron que el amaestramiento de mascotas también se puede realizar en el hogar, lo principal es tener paciencia y voz de mando, sin necesidad de ser agresivos. “Con voces de mando fuerte, ellos captan más rápido cuando el entrenador o el dueño les habla en inglés. Ellos entienden más rápido porque las palabras son más cortas”, explicó.

Entre las principales técnicas que podrían aprender las mascotas en el hogar están las siguientes órdenes: “sentado=sit”, “dar la mano=hand”, “acostado=flat”, ”abrazo del oso como saludo=hi”.

Los entrenadores recomiendan que se debe hacer entender a los perritos estas voces de mando repetidamente, para lo cual hay que practicarlas durante un periodo mínimo de dos meses. Además señalan que es muy importante premiar sus acciones con recompensas, tales como darles una comida (galletas) que les encante o un juguete para jugar (pelota). Y cuando ellos ya han entendido la razón de ser de estas voces de mando, hay que hacerlo diariamente como parte de su jornada.

Por ejemplo, Zeus, el perro del Municipio de Guayaquil ya se “gradúa” de un curso de adiestramiento básico luego de haber sido un perro que estuvo en la calle, él pudo aprender diversos trucos en los cuatro meses que tuvo de entrenamiento.

Su entrenador Javier Zabala, subjefe de brigada de vigilancia del Palacio Municipal, recordó que se le dio hogar en el Municipio y se lo integró como parte del grupo del Cuerpo de Agentes Metropolitanos que vigila el Palacio por pedido de la alcaldesa, Cynthia Viteri.

Añadió que ahora que regresa “graduado de la Escuela de la Infantería de Marina” estará más preparado para el control diario del Municipio y para los recorridos de vigilancia que se realizan en la Plaza de la Administración, en el centro de Guayaquil.

Entrenamiento a perros rescatados por la Unidad de Bienestar Animal

Un plan de adiestramiento para los perros rescatados por la Unidad de Bienestar Animal del Municipio de Guayaquil está previsto desarrollarse en la Infantería de Marina. Así lo indicó el sargento Javier Echeverría, quien comentó que luego de reuniones con representantes de esa unidad se acordó realizar el plan de entrenamiento de los canes que el Municipio tiene en un albergue, para que estos puedan ser adoptados por cualquier familia sin que tengan algún riesgo en su comportamiento. (I)