River, un perro mestizo de tres años y medio, es parte de los 18 canes del grupo Esparta, que junto con agentes metropolitanos especializados ahora refuerzan la vigilancia en exteriores de planteles educativos y zonas comerciales de Guayaquil.

Este can está bajo custodia de la Dirección de Bienestar Animal del Municipio de Guayaquil luego de haber sido retirado de su familia por un presunto abandono. Sin embargo, ellos llevan un proceso legal para recuperar esta mascota.

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Shirley Moreno, directora de la Dirección de Bienestar Animal del Municipio, explicó que el caso de River lo conocieron en marzo pasado, cuando hubo denuncias ciudadanas de un supuesto abandono de una mascota.

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Ella contó que como dirección municipal acudieron a la zona, donde comprobaron que el perro estaba en condición de abandono.

“Tuvimos acceso al video en que se ve que al perro lo están dejando del carro, él persigue y persigue y no lo recogieron. Luego, el perro regresó a la casa y los guardias lo dejaron entrar. Nosotros acudimos y nos percatamos de que su familia se había ido de viaje y el perro pasó solo tres días, lo que implica un abandono, eso es un incumplimiento a la ordenanza”, explicó.

Indicó que en ese tercer día lograron contactarse con la mujer que tenía a River y le explicaron la situación, el incumplimiento a la ordenanza.

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“Ella dijo que sí, que lo suelen dejar en la calle, pero que el perro sabe llegar solo a la casa. Eso es una contravención a la ordenanza. Su obligación debió haber sido que ella deje al perro adentro en su casa, porque pudieron haberlo atropellado, haber sido agredido por otra mascota o persona, entre otras cosas”, dijo.

En marzo pasado, River pasó a custodia de la Dirección de Bienestar Animal del Municipio de Guayaquil. Foto: Cortesía.

Expresó que en marzo mismo se abrió un expediente en la comisaría por este caso y le indicaron que lo iban a retirar a River como parte del procedimiento, por lo que le hicieron firmar una autorización de esterilización y de que se lo iban a llevar hasta cuando haya una resolución. “Como las pruebas evidenciaron un abandono, se resolvió que ya no regresaría con ella, no iba a ser devuelto”, enfatizó.

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Moreno explicó que pese a la resolución, la mujer realizó una apelación y que ese proceso está actualmente en sustentación. Dijo que ella hizo algunos escritos para que le devuelvan el perro. “Ella aceptó que el perro deambulaba en las calles, por eso no se hizo la devolución”, contó.

La alcaldesa Cynthia Viteri expuso el caso en sus redes sociales, en donde compartió el video como evidencia de la denuncia inicial. “Mujer que abandonó a su perro que la siguió cuando esta se marchó en el carro, ahora que el can está entrenado y recuperado exige que se lo devuelvan. No lo vamos a hacer, ella lo abandonó sin ninguna compasión y ahora River tiene una nueva y mejor vida”, expuso en sus redes.

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Sin embargo, la Fundación Rescate Animal desmintió esta versión. En un comunicado, explicaron que la Dirección de Bienestar Animal entró a la casa de la familia, revisó el lugar, y les hizo firmar “con engaños” un documento llamado “retiro de mascota como medida provisional” y además una “autorización para procedimiento quirúrgico del animal de compañía”, y le dijeron que luego de la esterilización lo devolverían.

La fundación indicó que River es un perro que rescataron del islote Puerto Salinas, en el golfo de Guayaquil, antes de la pandemia.

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Se manifestó que River era un perro silvestre, enfermo, desnutrido, con parafimosis, temeroso y cuando llegó a casa de la mujer que lo adoptó aprendió a abrir las puertas, tumbar personas y escapar debido a que esa es la manera como aprendió a sobrevivir.

“En casa de María José aprendió a socializar y a confiar en las personas, pero su problema de comportamiento era evidente y la familia lo tenía claro, hasta el punto de que hablaron con un entrenador para pagar unas clases”, se detalló en el comunicado.

Moreno insistió en que todo el procedimiento se realizó bajo el marco legal como se ha hecho con otros casos de maltrato y abandono en Guayaquil. Y que los anteriores dueños de River pese a saber de su comportamiento no se hizo el esfuerzo por esterilizarlo, ni hacerlo ver en su comportamiento.

Expresó que en Bienestar Animal se le han hecho chequeos médicos, tratamientos y que ahora es parte del grupo de canes que integra el escuadrón Esparta para la vigilancia de la ciudad. (I)