Durante el nombramiento y posesión del gabinete ministerial, el presidente de la República, Guillermo Lasso, indicó que ya tienen listo un primer borrador de reforma a la Ley de Educación Superior con miras a que el acceso a las universidades públicas y privadas del país sea libre.

En ese contexto, el mandatario pidió a Alejandro Ribadeneira Espinosa, titular de la Secretaría Nacional de Educación Superior, Ciencia, Tecnología e Innovación (Senescyt), procurar una reunión con los 73 rectores de las universidades del Ecuador.

“Necesitamos universidades libres y necesitamos una reforma de la Senescyt para que nuestros jóvenes ecuatorianos no sigan sufriendo una violación a su libertad individual, que ellos puedan estudiar lo que ellos quieran estudiar, no lo que les diga la Senescyt. No lo que les diga el Gobierno (...). Si los padres no se atreven a decirles a los hijos lo que tienen que estudiar, mucho menos lo puede hacer un gobierno”, sostuvo ayer, lunes, el jefe de Estado.

Publicidad

¿Reformar la LOES para eliminar la Senescyt o suprimir el Examen de Acceso a la Educación Superior?

El gobierno de Lasso, quien asumió ayer como presidente de la República, apunta a suprimir el requerimiento del Examen de Acceso a la Educación Superior (EAES), del cual se desprende el 60% de la nota de postulación para un cupo en las universidades públicas. La nota de grado corresponde al 40% restante.

El mandatario enfatizó que el borrador de reforma a la Ley de Educación Superior debe ser analizado con la participación de los rectores universitarios.

“Esa reforma es importante, urgente. No la hemos enviado a la Asamblea Nacional hoy (lunes) de noche, como era mi intención inicial, por respeto a los 73 rectores”, refirió el presidente Lasso.

Publicidad

Admisión a la universidad y concesión de becas, entre ejes de acción de Senescyt en Ecuador

Y lamentó que de 290.000 jóvenes que se gradúan de bachilleres cada año, solo 90.000 accedan a los cupos en los centros superiores, puesto que ese es el tope de la oferta a escala nacional.

“No puede ser posible que en pleno siglo XXI en el Ecuador las universidades tengan que pedir permiso al Gobierno para muchas de sus actividades, entre esas, ampliar su capacidad de acción con extensiones universitarias o con nuevas carreras universitarias o con la aprobación de nuevos sistemas de estudio como el sistema online. No puede ser, requerimos universidades libres, jóvenes libres para escoger su universidad y su carrera y universidades libres para brindar una mayor oferta universitaria”, expresó el mandatario.

Publicidad

Francisco Morán, rector de la Universidad de Guayaquil, consideró positiva la posición del nuevo Gobierno para incluir a los involucrados en la academia en el debate sobre la reforma que requiere el sistema superior.

Mencionó que es importante que la universidad pública retome el manejo de la admisión y nivelación, en el marco de la autonomía, pero que para ampliar los cupos para los estudiantes se necesita, además, reforzar las distintas modalidades, como la virtual, semipresencial o a distancia.

“Es decir, sábado y domingo en una modalidad semipresencial se podrían crear nuevas carreras para los estudiantes y aumentar ahí sí, ahí sí realmente, un cupo para este tipo de estudiantes con esta modalidad (…). Por ahí debe venir la cuestión de un acceso inmediato, es decir, más fácil sería por ese lado”, manifestó.

Morán señaló que con el sistema actual crear una modalidad de estudio resulta muy complicado, por lo que estimó que los centros superiores deberían tener más facilidades para aquello.

Publicidad

Alejandro Ribadeneira, principal de la Senescyt, ya tuvo un acercamiento con la realidad de la Universidad de Guayaquil, expuso el rector del centro guayaquileño y agregó que en los próximos días entregará al Gobierno una propuesta de reforma a la Ley de Educación Superior.

Por su parte, Joaquín Hernández, rector de la Universidad de Especialidades Espíritu Santo (UEES), también felicitó la iniciativa del presidente Lasso de invitar al diálogo a los representantes de los centros superiores en pro de tener universidades libres.

“Esas universidades libres son las que gozan de su autonomía en unos ámbitos que son claves: la aprobación de carreras, programas de posgrados y estudios y, en general, desde mi punto de vista, eliminación de criterios burocráticos que existen sobre todo en el Consejo de Educación Superior (CES) de exigir mayores controles, requisitos, porque se considera que mientras más de eso hay, más calidad académica existe, lo cual no es cierto”, manifestó él.

Hernández sostuvo que esa especie de “reglamentarismo” no es responsabilidad de los consejeros académicos que están al frente de las comisiones de carreras y programas de posgrado, sino que es un problema de concepción del sistema.

La UEES también tiene listo un proyecto de reforma que prevé hacer llegar al Gobierno nacional. (I)