Los guayaquileños eligieron en las urnas, el 5 de febrero, a una nueva administración política que reemplazará, a partir de este domingo 14 de mayo, la hegemonía socialcristiana que por tres décadas dirigió a esta ciudad. Luego de la sorpresiva decisión popular, el Municipio de Guayaquil y sus empresas públicas continuaron con procesos de contratación y, desde el 6 de febrero hasta el 30 de abril, adjudicaron 285 obras y servicios por cerca de $ 10 millones.

La mayoría de esos recursos, el 56 % ($ 5,6 millones), los asignaron la Autoridad Portuaria, la Fundación Terminal Terrestre y la Empresa Pública Municipal de Tránsito y Movilidad de Guayaquil. El cabildo destinó el 16 % ($ 1,6 millones) y la Empresa de Agua Potable (Emapag Ep), el 10 % ($ 1 millón). El restante 18 % (1,8 millones) lo contrataron nueve instituciones, como la Fundación Guayaquil Siglo XXI, Cuerpo de Bomberos, la EP de Turismo, la Corporación Registro Civil, entre otras.

En estos últimos tres meses, el Municipio y sus entidades priorizaron en contratar servicios de limpieza por un total de $ 2,6 millones; enlaces de datos y soportes informáticos, $ 1,9 millones; en construcciones y proyectos, $ 1,4 millones; en fiscalización de obras, cerca de $ 1 millón; y en contratación de personal de seguridad, $ 924.233.

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Las obras cuyas cintas no alcanzó a cortar Viteri y los retos que tendrá Álvarez para llegar a otros sectores con servicios

Las áreas que recibieron menos asignaciones fueron salud, con $ 210.000, para adquirir equipos de protección, reactivos y alimentación para pacientes hospitalizados; y ambiente, con $ 150.000, para realizar el desbroce de vegetación en zonas abiertas y la elaboración de un informe de gestión de medioambiente en el aeropuerto Joaquín de Olmedo del año 2022.

Los casi $ 10 millones adjudicados entre febrero y abril fueron asignados a un total de 92 proveedores: 56 compañías y 36 personas naturales, según una revisión a la contratación municipal de este periodo en el Sercop. De ellos, 17 concentran la mayoría de recursos ($ 8,4 millones) con contratos que van desde $ 100.000 hasta $ 1,8 millones. Entre ellos, la Corporación Nacional de Telecomunicaciones (CNT), Asoserbej, Sepribe, Orient Cel S. A., Soluciones & Ingenierías Hidrourbanas S. A., Policonstruc, Terralim-Asoserter, Daniel Donoso Cornejo, Blueairtech S. A. (Ver gráfico)

El monto superior lo recibió CNT, en marzo, para dar el servicio de enlace de datos e internet a la Empresa Pública de Tránsito por el plazo de un año. El contrato anterior finalizó a fines de febrero y era necesaria su contratación, según detalles del proceso, para “mantener las actividades operativas y administrativas” y “las operaciones de control y monitoreo”.

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Policonstruc y su exsocio, Luis Allauca Pincay (de 2021 a enero de 2023), sumaron $ 673.435 en dos contratos para fiscalizar la repotenciación de la estación de bombeo de aguas servidas Cerro Colorado e instalación de línea de impulsión a la planta Los Merinos y la prolongación del ducto cajón en el sector de CityMall. Los adjudicó Emapag a inicios de marzo y tienen un tiempo de ejecución de 565 y 330 días.

Mientras, la empresa quiteña Sepribe obtuvo cerca de $ 1 millón para dar el servicio de seguridad al Municipio y a Emapag. Estas compras se hicieron a través de catálogo electrónico, mecanismo que no permite el acceso público a la documentación de soporte. (I)

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César Cárdenas, director del Observatorio Ciudadano de Servicios Públicos.

‘Los contratos deberían ser revisados por el nuevo Alcalde, la mayoría debería rescindirse’

César Cárdenas, director del Observatorio Ciudadano de Servicios Públicos, cuestiona que el Municipio de Guayaquil y sus empresas hayan contratado servicios que no son prioritarios; y, además, considera que el nuevo alcalde, Aquiles Álvarez, debe revisar los contratos firmados en los últimos meses.

Desde febrero se han adjudicado $ 10 millones. ¿Qué piensa sobre el uso de esos recursos?

La alcaldesa debe firmar contratos sobre servicios y bienes que son sustanciales para el funcionamiento de la Municipalidad, pero no debe comprometer el presupuesto de todo el 2023 con proyectos que pueden esperar y que implican un conocimiento y procesos de decisión de la nueva autoridad...

La mayoría de contratos son de limpieza, mantenimiento y seguridad. ¿Los considera prioritarios?

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No son prioridad; son básicamente regalos para los contratistas.., es decisión del nuevo alcalde revisar esos contratos.

Hay otros procesos en curso por $ 4 millones

Parece que la alcaldesa (Cynthia Viteri) le está dejando el hueso al nuevo alcalde (Álvarez).

¿Por qué?

Ella debía haber retomado el tema de los libros de los niños; la educación es prioritario, porque están siendo usados para el sicariato y la delincuencia. Si no les proveemos las herramientas educativas para que puedan seguir sus procesos educativos, los condenamos a esa vida...

La alcaldesa indicó, en un enlace radial, que deja 70 obras en ejecución, como 4 pasos a desnivel, y 50 estudios.

Los puentes que supuestamente estarían listos para ser inaugurados no es así. Por ejemplo, en la 25 de Julio se está construyendo uno que ha sufrido una serie de complicaciones y ni siquiera es público. No hay un letrero que diga el costo ni en qué tiempo va a terminar. Hay días que trabajan y hay días que no. Ella quiere premiar a sus constructores con la continuidad de los contratos, y esos contratos deberían ser revisados y la mayoría debería rescindirse. Y sobre los estudios habría que ver qué tipo de estudios son, porque una cosa es lo que necesitamos los guayaquileños para vivir en condiciones de seguridad, de paz, de bienestar, (y otra lo) que realmente ellos (Alcaldesa y PSC) pensaban o piensan que necesita Guayaquil. (I)