Drama de familias por muerte de niña y pérdidas tras incendio en Pascuales, norte de Guayaquil

Sufrimiento, lágrimas, desilusión y otros sentimientos vivieron cuatro familias al observar que la casa de construcción mixta donde moraban fue devorada por el fuego que se originó dentro del inmueble. La desgracia fue mayor, pues murió una infante de 3 años. Todas las cosas que ellos tenían quedaron en cenizas.

Este siniestro se registró a las 19:04 del domingo 28 de febrero cuando los familiares, que se preparaban para ir a comer, vieron fuego alrededor de las paredes y alertaron a los demás de que tenían que evacuar porque las llamas estaban en la cúspide del techo.

Ellos lograron escapar entre el incendio voraz y el humo que los mantenía sin respiración y preocupados de que sus hijos pequeños salieran ilesos de este suceso.

Los vecinos, desesperados llamaron al Cuerpo de Bomberos y trataban de auxiliar a quienes salían de la casa en llamas. Al lugar acudieron doce unidades de la casaca roja para apagar las llamas. Entonces encontraron el cuerpo de la menor fallecida. Comentaron que la causa del incendio fue un posible cortocircuito y el fuego se expandió dejando la casa en ruinas.

Romina, la víctima, era una pequeña alegre, obediente y que le gustaba salir de la casa a jugar con los demás niños del vecindario. Así cuentan los vecinos sobre cómo era la infante. Lamentablemente, no logró escapar del fuego cuando se encontraba en la cama durmiendo. Su abuela, al tratar de salvarla, sufrió quemaduras de tercer grado y no pudo auxiliarla, comentó Mónica Arreaga, familiar de los afectados.

Asimismo, a la abuela tuvieron que trasladarla al hospital del Guasmo, pero no pudieron atenderla ya que no trataban allí por quemaduras y la enviaron al hospital Luis Vernaza, donde actualmente se encuentra internada.

La menor estaba al cuidado de su abuela ya que su mamá se encuentra ausente y el papá está en la cárcel, dijeron sus parientes.

La abuela trabajaba planchando ropa, lavando y reciclando plásticos en su hogar para darles de comer a su nieta y a su nieto.

Marcos Correa, tío de Romina, quien sufre de diabetes y dificultad para caminar, recuerda que solo vio cómo el fuego se apoderaba de la casa y sentía que se le calentaban las extremidades; él logró escapar, pero a su sobrina nadie la pudo salvar ya que el techo le había caído encima.

Romina, de 3 años, murió carbonizada dentro de su cuarto donde dormía.

Todos sus familiares lamentan el deceso de la pequeña porque ellos aseguran que pese a las limitaciones tenía un futuro esperanzador junto con su hermano y abuela.

Las cuatro familias están sin hogar, lo han perdido todo y desde que pasó el incendio hasta este lunes han dormido en la calle. Ellos solicitan a las autoridades que se hagan presentes en el lugar y puedan ayudar mediante fundaciones y apoyarlos con elementos para la construcción de una casa para poder vivir.

Los vecinos, mirando desde sus ventanas y puertas, se sienten consternados por la muerte de la menor y el desamparo de estas cuatro familias que necesitan un hogar para poder seguir adelante.

Además, explican que aportarán con cosas para ellos a consecuencia de que han perdido todos sus elementos necesarios.

Con desesperación, Diana Mantuano, tía de la pequeña, quiere recolectar dinero para sacar a su sobrina de la morgue y poder velarla; el costo para poder retirar el cuerpo es de $ 500, dinero que nadie de su familia tiene. Hasta este lunes en la tarde la misión de completar el presupuesto no se lograba.

La Alcaldía de Guayaquil, a través del equipo de Evaluación de Daños y Análisis de Necesidades de la Corporación para la Seguridad Ciudadana de Guayaquil (CSCG), entregó alimentos, artículos de limpieza y menaje de cocina. (I)