Con documentos en mano y sus maletas cargadas en los hombros, decenas de jóvenes llegaron acompañados por sus padres hasta el Centro de Movilización Occidental, ubicado en el norte de Guayaquil, para cumplir con el proceso de acuartelamiento que se dio inicio desde las 07:00 de este sábado 29 de abril.

La aspiración de servir al país, combatir los problemas que actualmente existen y encontrar oportunidades de crecimiento personal y laboral son las motivaciones de las decenas de jóvenes aspirantes nacidos entre 2001 y 2004.

Con la venia de sus padres o sin que ellos lo sospechen, jóvenes durmieron afuera de recintos militares para acuartelarse el fin de semana

En el sitio, a los aspirantes una vez que cumplen con una fila -que en las primeras horas se extendía por al menos una cuadra-, se les realiza exámenes médicos, clínicos, psicológicos y físicos para determinar si están aptos o no.

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Bajo un intenso sol, Obdulio Merchán acompañó a su hijo Daniel desde el suburbio con el afán de encontrar un oportunidad de crecimiento laboral.

Antes, el joven de 20 años estuvo trabajando por dos meses en un supermercado. No había logrado pasar el proceso de selección para la Policía Nacional.

“Es la oportunidad que pueda encontrar ahora. Él se va por su voluntad, nadie lo obliga, que aspire a ser militar o cumpla con el servicio”, auguró el padre.

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Proceso de acuartelamiento de jóvenes nacidos entre 2001 y 2004 se cumple en la Base de Movilización Occidental, norte de Guayaquil.

Posted by El Universo on Saturday, April 29, 2023

Otra madre, Isabel de la Ese, arribó desde El Buijó (Samborondón) con su hijo de 18 años, Nixon Yagual de la Ese. Él quiere seguir una carrera militar por el ejemplo de dos hermanos de ella que le han explicado sobre las enseñanzas y destrezas que cultivan durante el proceso de acuartelamiento.

Con la situación complicada de empleo, ella comentó que el ambiente puede servir para cultivar más el compañerismo, distinguir lo bueno de lo malo y que tengan conocimientos cívicos y militares.

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“Siempre decía que cuando se gradúe quería irse al cuartel, no está obligado, está porque quiere, hay personas que le están inculcando por seguir una carrera y gane un sueldo, él está motivado”, comentó la madre.

Ángel Inguillay, abuelo de Kevin Alvarado, uno de los jóvenes aspirantes, contó que estuvo de conscripto y le tocó enfrentar el conflicto de 1981 en la zona de Macará, cerca de la frontera con Perú, cuando los conflictos se concentraban con el país vecino.

El hombre contó que ahora su nieto podría enfrentar otros problemas que surgen a nivel interno con grupos armados y agregó que el aspirante tiene planes de seguir una carrera en Sistemas en caso de no ingresar a la conscripción.

El joven, de 18 años, indicó que quiere lograr seguir la carrera militar en representación de su familia, por ser el primero en hacer una carrera en la milicia.

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“Defender a la patria para que se acabe todo lo que está pasando ahora en Ecuador”, dijo el aspirante, sobre su motivación de llegar a este acuartelamiento.

Édison Moscoso Paredes, quien llegó desde Milagro con su madre y padre, se mostró seguro de manifestar su deseo de aportar positivamente en hacer frente a problemas que afectan a la sociedad en temas de seguridad.

“Ser aquel cambio que queremos ver en el país para enfrentar la corrupción y narcotráfico, que está afectando al país en este momento”, dijo Moscoso.

José Arreaga, de Durán, 18 años, y otro joven Saúl Preciado, de 19 años, contaron que quieren integrarse a las filas de las Fuerzas Armadas con el deseo de servir a la patria.

Madres y padres fueron a despedir a sus hijos que respondieron al acuartelamiento. Foto: José Beltrán/ El Universo Foto: El Universo

Saúl, quien llegó desde San Eduardo, mencionó que tras graduarse hace pocas semanas del colegio le llamó la atención la disciplina y el rendimiento físico que puede ganar en este año de acuartelamiento y además quiere seguir este proceso como lo hicieron su padre y un tío.

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El capitán de navío Manuel Armando Santander, comandante de la Base de Movilización Occidental, mencionó que los jóvenes se someten a exámenes y posteriormente se declaran aptos para la distribución en las unidades militares donde permanecerán un año para el servicio militar.

En la jornada de este sábado se prevé acuartelar a 350 ciudadanos e igual número el domingo siguiente. A nivel país se busca sumar a 5.000 aspirantes.

Él mencionó que en este periodo de conscripción se prepararán en instrucción militar y además en conocimientos complementarios con el Ministerio de Agricultura y Secap y además con el programa de bachillerato intensivos, para aquellos no hay terminado ese periodo escolar. (I)