Cada semana pasan unos 150 migrantes por punto de atención de la terminal de Guayaquil; allí se está orientando sobre asuntos de derechos, protección y asistencia

Franklin, de 21 años, es un migrante venezolano que huyó de su país luego de recibir amenazas. Con varias maletas, él junto con su pareja y su hija de dos años llegaron hasta un punto informativo que se ubica en la planta baja de la terminal terrestre de Guayaquil. Allí, él buscaba conocer alternativas para saber de los avances de un trámite presentado en Esmeraldas para tener protección internacional.

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El joven, que se dedica a la venta de caramelos en la calle, recibió la sugerencia de asistir a la sede de una organización no gubernamental para tener mejor orientación legal en el trámite que lleva esperando desde enero pasado. En esa época ingresó al país por Carchi, y ahora reside en la urbe en busca de agilizar el trámite.

Ciudadanos extranjeros, como Franklin, son atendidos a diario con diversas consultas en este nuevo punto de atención abierto en convenio entre la fundación Terminal Terrestre de Guayaquil y la Agencia de la Organización de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur).

Eleana Aguilar, oficial asociada de protección de la oficina de la Acnur en Guayaquil, recordó que la terminal terrestre es una zona de alto tránsito que sirve como conexión de los migrantes que se movilizan al norte y sur del país para dirigirse hacia Colombia y Perú, respectivamente, por lo que allí tratan de orientar a los ciudadanos, se identifican sus principales necesidades y se les brindan los diferentes canales de comunicación con organizaciones y entidades.

Ahora, en la época pospandemia, justamente se habilitó el punto informativo para orientar a los migrantes que llegan a la ciudad o están de paso hacia otras localidades. “Responde, en principio, a población que va en tránsito. Sin embargo, ahora hay mucha población que decide quedarse en Guayaquil y no conoce la ciudad; entonces, la información que se les da es importante para que puedan empezar a vivir acá”, comentó Aguilar.

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En ese punto, cada semana se dan entre 100 y 150 atenciones a migrantes que pasan o llegan a la terminal terrestre. Principalmente, entre otros temas, se les ofrece orientación sobre acceso a derechos, como salud y educación, así como asistencia humanitaria, protección, integración socioeconómica y otros servicios que brinda el Gobierno y otras entidades no gubernamentales.

En el sitio también hay varios folletos disponibles con información detallada acerca de los trámites para acceder a la condición de refugiado, albergues disponibles para personas migrantes, teléfonos de contacto de instituciones estatales y entes no gubernamentales y, además, los pasos a seguir en caso de vivir un episodio de explotación o abuso sexual.

A su vez, las familias reciben orientación sobre las opciones que tienen para que sus hijos en edad escolar puedan integrarse al sistema educativo en Guayaquil y de otras ciudades del país; asimismo, conocen la oportunidad de recibir atención gratuita en el sistema de salud, en caso de requerirla.

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Antes de la pandemia, la terminal terrestre ya recibía flujos diarios de migrantes de varias nacionalidades, sobre todo de venezolanos.

En esa época se instaló un punto de atención para entrega de asistencia humanitaria con kits de higiene. Allí, los responsables del sitio recibían a muchos migrantes que tenían consultas de atenciones que requerían en otras ramas y también sobre diversos temas de la ciudad.

Andrea Morán, directora subrogante de Comunicación Social y Marketing de la fundación Terminal Terrestre de Guayaquil, comentó que hubo meses en que la estación matriz recibía a unos mil ciudadanos extranjeros en condición de movilidad cada día, y se detectó la importancia de contar con un punto informativo para que ellos conozcan dónde podían atender sus principales necesidades.

“Nuestro compromiso es la inclusión. Es muy importante el poder ayudar a estas personas que están en estado de movilidad huamana, huyendo de algún problema o algo; siempre vamos a darles la mano y extendérselas para todo lo que necesiten”, dijo

Ella destacó que el personal de Acnur también colabora con capacitaciones de diversos temas, como derechos humanos, derecho internacional, asilo, movilidad humana y protección internacional para el personal operativo de la terminal. Esto se da con el propósito de que los servidores, cuando se percaten de un migrante, analicen su situación y, en caso de ser necesario, le sugieran acudir al punto de atención.

La atención en el punto informativo se da de manera gratuita y se extiende de lunes a domingo, en horario de 08:30 a 17:30.

Según datos del Grupo de Trabajo para Refugiados y Migrantes de Venezuela (GTRM), Ecuador se ha convertido en el nuevo lugar de residencia de más de 500.000 personas venezolanas, que es una de las poblaciones con mayor movilidad en los recientes años en toda la región.

Detalle

En la terminal terrestre se registran más de 100.000 personas al día entre pasajeros de buses de distintas cooperativas y usuarios que asisten a los comercios. Antes de la pandemia se llegó a estimar un movimiento de unos 1.000 migrantes de distintas nacionalidades por día. (I)