Desde los comercios aledaños al mercado de Sauces 9, en la avenida Antonio Parra, hasta los de Sauces 6, del lado de la avenida Isidro Ayora, reflejan mayor control en el uso de mascarilla y el distanciamiento social como medida de prevención del COVID-19.

El sector de Sauces, que a inicios de noviembre el Comité de Operaciones de Emergencia (COE) cantonal lo refirió como el que registraba el mayor nivel de contagios, ahora salió de las cifras en rojo y según sus habitantes es notorio el cambio debido a la intervención constante de las brigadas que integran el programa de sectorización de Guayaquil por la pandemia.

En la actualidad son siete sectores intervenidos ante la mayor incidencia de casos COVID-19. Estos son: Socio Vivienda, en el noroeste; Los Vergeles, Samanes, Alborada, Urdesa, en el norte; y Fertisa y Guasmo norte, en el sur.

Publicidad

El reciente reporte de la mesa técnica de Salud, adscrita al COE local, dio cuenta de que la cifra de casos confirmados por prueba PCR aumentó de 1,47 a 1,48 por cada 10.000 habitantes y la cifra de fallecidos por día por el virus pasó de 8,7 a 14,3. A inicios de diciembre, con una transmisión a la baja, la media era de 3 o 4 decesos.

Según cifras del Municipio de Guayaquil, son más de 5.000 personas, aproximadamente, 1.250 familias, 42 manzanas que semanalmente recorren los brigadistas rastreadores de COVID-19 para mantener controlado ese sector que aún integra la lista del plan municipal de control de la epidemia.

En recorridos hechos por este Diario se evidenció que los equipos de sectorización empiezan sus recorrido casa por casa, negocio por negocio desde las 08:30 hasta las 13:00.

Publicidad

En ese tiempo visitan a los residentes y comerciantes para brindar atención médica. ¿En qué consiste esta? Se le revisa la presión cardiaca, arterial, la saturación y su sintomatología.

Norma, moradora de Sauces 6, recuerda que hace más de un mes ella pidió auxilio por su papá que estaba con problemas al respirar ya pasado el mediodía.

Publicidad

"A los médicos no les importó el horario, creo que ya se retiraban, e ingresaron a revisar a mi papi, como estaba con un cuadro complejo, se hizo el proceso para llevarlo al Bicentenario", recordó la mujer.

A más de la atención médica, los profesionales también hacen énfasis en la prevención del virus, les explican el correcto uso de mascarillas, así sea al salir a comprar a la tienda.

Ana, residente de Sauces 8, explicó que ha visto cambios positivos en su peatonal, pues ya más personas salen a comprar con sus implementos de bioseguridad.

"Incluso la vez que fui por los cangrejales ya no los vi tan abarrotados como los últimos meses cuando era antes de la veda. Eso sí era desesperante, ahora se ve que se está respetando el aforo incluso y eso es bueno para disminuir el contagio en este sector", comentó la moradora.

Publicidad

Este trabajo de control en comercio los desarrolló equipos de Justicia y Vigilancia, agentes metropolitanos, entre otros más, para exigir que se cumplan todas las medidas de bioseguridad que rigen en la urbe, como el aforo al 30%, obligatoriedad de uso de mascarilla y distanciamiento, uso de alcohol, entre otros más.

Sin embargo, moradores de este sector, explicaron que se tiene que recordar a los tenderos que usen la mascarilla.

"Yo salgo con mi mascarilla y mi frasco de alcohol porque he visto que los tenderos y los extranjeros que tienen sus negocios por aquí no los usan de forma debida y eso me da temor porque yo quiero proteger a mi familia, de qué vale que yo me cuide si ellos que me venden los productos no lo hacen, existe el riesgo aún", lamentó Ana. (I)