En la calle 6 de Marzo, centro de Guayaquil, los artesanos que elaboran monigotes dicen que afrontan dificultades para conseguir papel periódico, materia prima de sus creaciones.

Francisco Mieles asegura que por un quintal del insumo les piden entre $ 25 y $ 30, cuando el año pasado esa cantidad costaba de $ 10 a $ 12.

"Ahí no conviene", expresa el hombre y comenta que con todo ese papel podría dar forma a unos 20 muñecos.

Publicidad

La calle 6 de Marzo es tradicional en Guayaquil para el comercio de años viejos. A lo largo de diez cuadras o más, decenas de artesanos asombran con su creatividad al plasmar personajes de películas taquilleras o al recrear a políticos y a otras personalidades del acontecer nacional.

La cantidad de visitantes registrada en las últimas semanas del año que finaliza ha motivado la peatonalización de la arteria para favorecer la exhibición y comercio de los monigotes, puesto que las veredas son incluso tomadas por expendedores de comida rápida.

Pero en tiempo de pandemia no están permitidas las aglomeraciones. Así que los artesanos esperan las directrices del Municipio frente a ese impedimento, confiando en la no afectación de su actividad.

Publicidad

"Aquí es tradicional, vamos a salir a vender, así sea online", bromea Carlos González mientras manipula fibra de vidrio en la tarea de obtención de un molde de un muñeco del personaje animado Mario Bros.

El artesano planea vender la copia en $ 15, para que un colega reproduzca más figuras. Y se muestra indiferente al fuerte olor de un líquido engomado, la tarde del jueves 1, en el portal de su casa situada en 6 de Marzo y Cuenca.

Publicidad

Repite que el papel está caro, pero a la vez manifiesta que está tranquilo porque sus clientes no han dejado de hacerle pedidos. Calcula que comercializa unos 500 muñecos en cada despedida de año.

En el cruce con Capitán Nájera, Pablo Mera, de 37 años y 25 de ellos dedicados a la elaboración de años viejos, dice que como dueños de inmuebles no tendrían problemas para ceñirse a los protocolos que impondría el Municipio, que el inconveniente sería para los comerciantes ambulantes que incluso duermen en las veredas, puesto que, considera, incurrirían en aglomeraciones.

Mientras coloca papel blanco en una bola con puntas, rostro, brazos y patas, que representa al virus del COVID-19, asegura que aprendió el oficio de su papá y que hizo monigotes de madera. Él trabaja con Cindy Chaguay y Ángel Ríos, los tres tienen la misión de producir 100 muñecos para cumplir con un pedido.

En 6 de Marzo y Gómez Rendón, Luis Ronquillo dice que estos días el 40 % de artesanos está elaborando años viejos por efecto de la escasez de papel y "la falta de circulante".

Publicidad

"No hay escuelas, no hay instituciones, hemos estado parados, ojalá ya empiece a moverse", comenta el artista, que con espumafón recrea la cabeza de un postulante a la Presidencia de la República.

Dice que en días próximos cuando se prevé más actividad en la 6 de Marzo se podría ver si los artesanos antiguos "están completos" o si alguno falleció en los meses críticos de la pandemia. Confía en el primer escenario, puesto que asegura que "han estado guardados".

Miguel Cedeño Marín, duraneño, también sostiene que el papel está escaso y caro. En la 6 de Marzo busca un muñeco alusivo al COVID-19, puesto que está convencido de que la representación será popular en la despedida del 2020.

Su intención es reproducirlo. Le piden $ 20 y espera comprarlo antes de que por la cercanía de diciembre aquel año viejo duplique su precio.

Los personajes de la película Avengers, de la serie animada Mickey Mouse y aquella bola COVID-19 figuran como representaciones repetidas.

Gloria Gallardo, presidenta de la Empresa Pública Municipal de Turismo, refiere que el protocolo respecto al comercio de monigotes en la calle 6 de Marzo aún no está en análisis porque un trabajo en este sentido sería prematuro en estos días. Señala que el comportamiento del virus determina la drasticidad de las medidas.

"Vamos pasito a pasito, como si Guayaquil estuviera recién aprendiendo a caminar, ya el COE cantonal en su momento anunciará decisiones, porque el virus sigue aquí", expone la funcionaria.

En la despedida del año, la empresa ha promovido la Ruta de los monigotes gigantes, otro atractivo para apreciar el talento de los artesanos. (I)