En su horario tenía que iba a recibir dos horas de clases virtuales en la mañana, a partir de las 11:00, y dos horas en la tarde, desde las 16:00. Pero en el primer día recibió solo 40 minutos por la plataforma Zoom, porque el profesor, "para salvar parte de la clase", se conectó por su cuenta por la opción gratuita que les permite estar en línea solo ese tiempo, contó un estudiante de Odontología de la Universidad de Guayaquil, quien está preocupado porque le han reducido el número de materias en este ciclo. Él, por ejemplo, no verá Imagenología I.

Otros estudiantes no podían entrar a las clases virtuales desde sus teléfonos celulares, ya que no se les abría la aplicación móvil o no coincidían las contraseñas y claves que les habían dado. A esto se sumaron las fallas en la conectividad a internet que tuvieron profesores y alumnos y la falta de práctica al momento de manejar las herramientas virtuales. Pero también hubo grupos que no presentaron inconvenientes y recibieron en línea sus asignaturas.

Así transcurrieron las primeras horas del inicio de clases oficial en la Estatal, como todavía se llama a la universidad pública más poblada de Ecuador, que arrancó su nuevo año o periodo académico ordinario este miércoles 1 de julio con la modalidad virtual, como reciben las otras universidades y sistemas educativos del país por la pandemia mundial del coronavirus.

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Con 50 878 alumnos matriculados en este ciclo académico, a diferencia de años anteriores, donde empezaban las clases entre 70 000 y 74 000 estudiantes de pregrado en promedio, las autoridades inauguraron con un acto presencial, a las 13:00 del 1 de julio, las clases en la modalidad en línea. A esta actividad asistieron los 17 decanos que actualmente tiene la Universidad de Guayaquil.

En este periodo constan 2054 docentes que imparten sus clases a través de las 2897 aulas virtuales que se habilitaron mediante la plataforma Moodle 3.8.2 con licencias para Zoom, se indicó.

La semana pasada hubo quejas de alumnos y docentes porque salieron más de 100 profesores, a quienes les dieron por terminado su contrato ocasional. Ahí, un grupo de estudiantes y docentes mostraron su descontento con esta medida, ya que los que quedaron asumieron materias que impartían los desvinculados. Algunos incluso dijeron que les dieron materias que no eran "su fuerte" o de su rama de especialización.

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Los problemas en el inicio del periodo lectivo ordinario se dieron en las tres jornadas: matutina, vespertina y nocturna.

"No se podían abrir desde aplicaciones móviles, solo mediante el navegador. Los usuarios y contraseñas nos enviaron un día antes e incluso hasta a algunos compañeros les enviaron el mismo día del inicio a clases. Desde mi perspectiva, algunos docentes no sabían aún cómo manejar esta nueva modalidad, incluso tuve problemas en cuanto a la conexión de Zoom, porque en la plataforma nos ponían otros ID y no coincidían para poder entrar a la reunión, así que uno tenía que escribirle al profesor para que nos pasen el ID correcto de la clase", contó Paula Valle, de Comunicación Social.

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Para ella, y luego de que le pasaran el ID correcto, la calidad de la señal fue buena. "Eso hace que nosotros podamos entender y no perder el hilo de lo que se nos está comunicando. Todo esto está siendo nuevo tanto para nosotros, los alumnos, como para los profesores de cada materia, pero pienso que al pasar los días nos acostumbraremos y aprenderemos a utilizar esta nueva modalidad que es online", agrega.

"Muchas personas sí pudieron recibir clases, pero hubo problemas que fueron más allá de la conectividad. Los estudiantes sentimos que hubo errores en la comunicación por parte de la Universidad hacia la forma en la que se iba a desarrollar el proceso y hubo muchos estudiantes que se sentían perdidos y recurrieron a nosotros los dirigentes para poder guiarse un poco de cómo poder llevar a cabo sus clases. Muchos chicos estuvieron desesperados hasta el último momento por no contar con las credenciales para acceder a las plataformas...", expuso Lía Holguín, quien agregó que ya este jueves hubo una notable mejora y que todavía hay mínimos problemas.

Roberto Passailaigue, interventor y rector de la Universidad de Guayaquil, califica como exitoso el inicio del año en la modalidad virtual, pues dice que es la primera vez que este centro de educación superior, en sus 152 años, se lanza a este tipo de propuesta. No descarta las fallas o problemas que se registraron sobre todo el miércoles 1 de julio. Sostiene que solo entre el 3 % y el 4 % de todo el ambiente virtual (con 2897 aulas virtuales) presentó inconvenientes.

Aseguró que aquello se dio porque profesores y estudiantes no prestaron la debida atención cuando se los capacitó o recibieron las instrucciones para el uso de las plataformas. También dijo que el mismo miércoles detectaron que hay docentes y alumnos que se quedan conectados a las plataformas todo el día, ya por desconocimiento o no, y eso hace que los grupos que quieran acceder no puedan porque el sistema está copado.

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Sobre algunas materias que no están recibiendo los estudiantes indicó que aquello es porque en línea todavía no se pueden dar asignaturas que son prácticas. (I)