La espera es larga, agobiante. Empieza desde las 04:00 en el Centro de Especialidades Valdivia Sur del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS). Afiliados inician una fila sosteniendo un papelito firmado por un médico y su cédula. El fin es obtener una cita con un especialista.

Allí se dan 200 turnos diarios, sin embargo, la cantidad de afiliados y jubilados abarrota el centro médico. Algunos logran tener su cita, a otros les piden regresar porque no hay disponibilidad del especialista.

Así empezó la mañana del miércoles 15 para Carlos y Pedro, dos jubilados que hicieron fila más de una hora para obtener cita en oftalmología. La mujer de recepción les indicó que deben regresar el martes 21. Desalentados, sin su cita, salieron del centro médico.

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El malestar en la atención en centros del IESS no solo se escucha en las filas que se dan para diversos servicios de atención. También se hacen eco por redes sociales y a través de la Defensoría del Pueblo.

En esta última entidad, existen 30 procesos por falta de medicamentos para pacientes de enfermedades catastróficas. También hay un proceso por no entregar retrovirales.

Mientras tanto, en los centros médicos las quejas se centran en la falta de especialistas, de insumos, larga espera para obtener cupo de cirugía, demora en la atención por emergencia y en citas especializadas, desatención a jubilados.

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Dora García, presidenta de la Asociación de pacientes transplantados, contó que por lo menos 150 son pacientes del hospital Teodoro Maldonado y el 70 % no tienen hace dos meses las medicinas tacrolimus y everolimus.

Ella indicó que se reunió hace unos días con el gerente de ese hospital, José Fadul Jurado, para una solución inmediata.

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A más de esta reunión, una veeduría de Participación Ciudadana y Control Social también realiza indagaciones sobre temas de provisiones de medicamentos, contratos, escasez, presunta mala calidad de medicinas e insumos, entre otros.

Este Diario solicitó información al IESS sobre este tema desde el lunes pasado, pero hasta ayer no hubo una respuesta. (I)

Afiliado de 32 años: ‘Fui atendido en 4 centros y no me operan’

Luis Díaz, de 32 años, padece fuertes reflujos, dolores de estómago y malestar. Tiene una hernia hiatal, enfermedad congénita que detectó hace dos años. Él lamenta que haya pasado por dos centros médicos y dos hospitales del IESS y aún no logra remediar su salud. Se mantiene con omeprazol.

El suplicio de este afiliado, padre de un niño de 5 años, empezó en mayo del año pasado. Acudió al gastroenterólogo en el Centro de Especialidades Central Guayas del IESS, en la Bahía. Allí le indicaron que tiene una hernia tipo 2 y que es operable.

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El 19 de junio lo derivaron al hospital Efrén Jurado. Lo atendieron en consulta externa, pero le indicaron que no lo podían operar y fue derivado para el 8 de julio al hospital de Los Ceibos.

“Allí me atendió un médico cirujano y me dijo, aquí no te podemos operar, no hay camas, el único lugar donde pueden hacerlo es el Teodoro Maldonado Carbo. Me derivaron por tercera vez el 29 de julio del año pasado”, expresó.

Agregó que allí tuvo dos consultas y le hicieron exámenes de sangre y un electrocardiograma. Fue un cardiólogo, lo revisó y le dio luz verde para la operación. Sin embargo, ahí se estancó todo otra vez.

“Me dijeron que hay una lista grande de espera. El médico me dijo, muchacho, dame tu nombre y tu número, apenas haya oportunidad se te opera, si pasan 6 meses debes hacerte los exámenes otra vez”, recuerda.

Luis cuenta que ha llamado para saber qué pasó con su caso, pero no logra contactarse.

Un caso similar es el de Jorge Salazar, afiliado de 43 años. Él padece de osteomielitis, ocasionada por una bacteria estafilococo en la pierna izquierda. Esta le causó un grano que expulsa líquidos y pus.

La situación empeoró el pasado 7 de enero cuando sintió un dolor intenso y empezó a drenar pus. Fue de emergencia al hospital de Los Ceibos.

“Tenía mojado el pantalón, quise que me revisen, o ingresen, porque sentía dolor, malestar, pero me mandaron a coger cita con medicina general”, recordó.

El afiliado detalló que fue por su cuenta a emergencia al hospital Luis Vernaza, donde lo asistieron y pagó $50. Luego logró sacar una cita para medicina general en el Centro Quirúrgico Valdivia, en el sur. Lo atendieron y lo derivaron a traumatología; la cita se la dieron para el 18 de febrero.

En redes denunció la falta de atención médica y el hospital de Los Ceibos se contactó, y el jueves lo atendieron por medicina general. “El doctor me dijo que con él no es la cosa, que espere al traumatólogo”. (I)

Afiliada de 62 años : ‘Pasé 10 horas por atención de emergencia’

Glenda llegó cojeando al área de emergencia del hospital Teodoro Maldonado Carbo, a las 08:00 del martes pasado. El dolor era intenso desde el lado izquierdo del vientre hasta la parte de la espalda baja. Al ingresar le colocaron una cinta azul “No urgente”, pese a que la mujer se retorcía del dolor.

Luego le indicaron que no podían atenderla allí, que por el sistema la derivaron al Centro Quirúrgico Valdivia, en el sur, que debía ir por su cuenta de forma inmediata. No le dieron explicación adicional. La mujer salió cojeando y secándose las lágrimas del área de emergencia, llamó a su esposo para pedirle que la lleve.

“Si uno paga, deben atenderlo, no había mucha gente, no sé por qué no se me brindó la atención”, lamentó la mujer.

Ella contó que acudió a ese centro y le hicieron exámenes, la inyectaron para calmar el dolor. Entre atención y atención, le dieron las 18:00.

“Me quedé con coraje porque estuve todo el día y ni siquiera me dieron una nueva cita para hacerme tratar”, explicó la mujer, que también padece de hipertiroidismo y tramitó un pase para tratamientos de yodo en Solca, que está pendiente de concretar.

Otro inconveniente de larga espera en el área de emergencia fue reportado por pacientes el pasado 10 de enero.

Sandra Mena explicó que llegó con su madre que tenía fiebre, vómitos, por una infección y alza de los niveles de glucosa a causa de la diabetes.

“Llegamos a las 14:00 y la atendieron, me dijeron que tenían que internarla pero que esperara porque aún no había disponibilidad de cama”, dijo.

Agregó que pasaron las horas, le traían los sueros y restos de medicinas, pero seguían en el área de espera.

“Vimos que eran las 20:00 y seguíamos esperando cama, entonces nosotros empezamos a hacer relajo y a las 23:00 hubo disponibilidad. Allí la pudimos internar en la zona de medicina interna, en el área para diabéticos, para que esté más tranquila”, expresó.

Agregó que ese día hubo otros inconvenientes en el área de atención de emergencias en ese hospital.

“Ese día llegaron varias madres con niños de un mes, dos meses. Parece que el pediatra estaba en sala, les pidieron que esperaran, pero llegó la medianoche y nada que recibían la atención”, explicó Mena.

En ese hospital, usuarios lamentaron que la atención sea demorada. “Se da más en el cambio de guardia y en las noches, ahí se demora, debería ser más ágil porque se necesita una atención urgente”, dijo una afiliada que llegó el miércoles con dolor abdominal. (I)