Un mosaico de nacionalidades se divisaba en la tribuna y palco oeste del estadio Monumental y cada una exponía parte de su cultura en los atuendos y accesorios que usaron quienes desde el viernes participan en la asamblea internacional de los Testigos de Jehová, que tiene como sede a Guayaquil, 40 años después de un primer evento de esta naturaleza y magnitud.

Vestida con hanboks (traje típico) de colores blanco y rojo una pareja de coreanos seguía atenta la serie de discursos que se proyectaba en once pantallas gigantes, de alta resolución, distribuidas en el campo de juego, a la altura de cada localidad.

Por ratos, él agitaba un abanico beige para ventilarse, pues aunque la mañana estaba sombreada se sentía calor.

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A pocos metros de los asiáticos, un matrimonio polaco lucía ropa de la cultura tradicional campesina. Por encima del traje blanco con bordados y apliques, el hombre tenía un chaleco y ella un atuendo del mismo color e iguales detalles.

Cinco mil trescientos extranjeros participan en la convención que se mantendrá hasta mañana con una agenda que incluye discursos, reflexiones bíblicas, cánticos, bautizos, proyección de películas, dramatizados, testimonios y demás.

Delegados estadounidenses, uruguayos, argentinos, colombianos y cubanos son parte del contingente internacional que más los participantes locales (de varias provincias) suman unos 45.000 asistentes, según Juan Paz, portavoz de la cita.

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Antes de que empiece la convención, él comentó que la asamblea internacional es un evento que los Testigos de Jehová realizan cada cuatro años y se desarrolla en varios países. En esta ocasión, Ecuador es una de 22 sedes que acogen esta serie de encuentros que se iniciaron en mayo y culminarán a fines de este año.

“El objetivo es que todos nos conozcamos y que compartamos”, expresó Paz, quien agregó que la visita de los extranjeros se mantendrá por mínimo siete días, lapso en el cual calcula se generen $ 15 millones en ingresos para Guayaquil y $ 30 millones en el país, pues muchos viajan a sitios como Galápagos o la región Sierra.

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Desde dos plataformas, cuyas estructuras emulan el diseño de una casa, los oradores comparten sus discursos; uno en español y otro en inglés.

Cada intervención duró el viernes, en promedio, 15 minutos con el acompañamiento de un video con testimonios relacionados con los temas sobre los que se reflexiona, según la Biblia.

El tema central de este encuentro que, a nivel mundial, se presenta en cuatrocientos idiomas es: El amor nunca falla.

Kenneth Cook y Seth Hyatt son los representantes de la sede mundial de los Testigos de Jehová que participan en Guayaquil. En total, a nivel global hasta noviembre se realizarán veinticuatro asambleas.

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Ricardo Mayorga, orador ecuatoriano reflexionó este viernes sobre el prestigio y la fama como dos de los componentes que sumados a las riquezas, a la sabiduría humana, a la fuerza física y a la belleza constituyen cosas que pueden terminar fallando.

Ese fue el compendio de discursos con el que se inició la jornada. Durante los tres días la convención será desde las 09:20 hasta las 16:50.

45 mil participantes es el estimado para el evento.

La agenda de hoy, sábado

A las 09:45 se inicia la serie de discursos con el tema: Mostremos en la congregación el amor que nunca falla. Y desde las 11:45 se efectuarán los bautizos de quienes se integrarán formalmente a esta congregación, para ello en el estadio se dispusieron seis piscinas. 

El centro sintió  trajín de visitantes 

Al trajín característico del centro de la ciudad se sumó el ajetreo de varios visitantes extranjeros que este viernes salieron en buses hacia el estadio Monumental para participar en la asamblea internacional de los Testigos de Jehová, un evento que dicha congregación organiza cada cuatro años en varias sedes.  

Como muchos de los turistas, cuya estadía mínima se prevé de siete días, se hospedan en hoteles de la zona céntrica; varios de los vehículos salieron desde las inmediaciones del parque Seminario.    

Por la calle Aguirre los buses se dirigieron hasta el puente El Velero para salir a la zona del estadio. Antes de que se inicie la ceremonia de inauguración, la avenida Barcelona concentró gran cantidad de vehículos, entre buses y carros livianos. 

Presencia de vigilantes de la Autoridad de Tránsito Municipal (ATM) y de la Policía Nacional se evidenció en el sector del estadio que acogerá la convención internacional, en la que participan 5.300 extranjeros, así como ecuatorianos de varias provincias.  (I)