Incentivar el aprendizaje a través del movimiento y los sentidos es lo que se logra en el sensory lab, que se traduce al español como Laboratorio Sensorial, y es una de las implementaciones de la unidad educativa Thomas More, ubicada en el km 14,5 de la avenida León Febres-Cordero (La Aurora- Daule). El espacio, dirigido a los estudiantes de preescolar de la institución (desde maternal hasta primero de básica), se implementó el pasado 15 de abril, con el inicio de las clases en la institución que incluyó además de preescolar, a primaria y secundaria. El sensory lab está divido en un área exterior y otra dentro del aula, es dirigido por una maestra encargada de diseñar actividades sensoriales (auditivas, olfativas, visuales, gustativas y táctiles) que estimulan la percepción y diversos aprendizajes a través de los sentidos, explica Elsa Patiño, directora de preescolar. El acceso y trabajo en el laboratorio no tiene costo, los estudiantes podrán entrar en el orden del horario de actividades de cada sección. “Los materiales que se utilizarán son diversos, ya que se trata de conocer y desarrollar los sentidos. Es una iniciativa pensando en la necesidad de retomar en los chicos el aprendizaje a través del movimiento y sentidos, que es lo más importante en edad preescolar”, dice Patiño. Dentro de la planificación también están previstos los pequeños experimentos que realizarán los estudiantes, ya que de manera indirecta conocerán leyes de la naturaleza y física como la de causa-efecto, antes-después, gravedad y esto los conducirá a nuevos descubrimientos y conclusiones, indica Patiño.(F)