Aunque Francisca Soledispa, de 76 años, acude una vez al mes al distrito de Salud número 7, en el bloque 1 de Bastión Popular, para retirar sus medicinas de la hipertensión, ella estimó que han pasado dos décadas que no se vacuna contra la influenza estacional, conocida como gripe.

“Yo le tengo temor a las inyecciones”, justificó sonriente la mañana del jueves después de que una brigada le aplicara la vacuna en su casa.

Según volantes que distribuye el Ministerio de Salud Pública en sus centros y subcentros, en el país circulan varios virus de influenza, pero los más comunes en el medio son el de la AH1N1, H3N2 y B.

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Cada año se ejecuta una campaña de vacunación que prioriza a los grupos vulnerables: embarazas, puérperas, trabajadores de la salud, personas de 5 a 65 años con discapacidad, adultos mayores y privados de la libertad. La vacuación se hace a domicilio y en los centros de Salud del Ministerio, a donde puede acudir todo aquel que quiera vacunarse. 

La actual se inició a finales de noviembre pasado y culminará el 28 de febrero.

Franklin Bajaña, responsable de Estrategias de Prevención y Control de la zona 8 (Guayaquil, Durán y Samborondón), estimó que a nivel nacional la vacunación contra la influenza abarca a más de 4 millones de personas.

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Para la zona 8 se destinaron aproximadamente 800 mil vacunas. Hasta el miércoles se estimaba que más del 40% de la población de dicha jurisdicción ya estaba vacunado.

“Utilizamos las vacunas con la finalidad de proteger sobre todos los tipos de influenza al personal que vacunamos”, manifestó el funcionario.

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Durante el 2018, en la jurisdicción integrada por Guayaquil, Durán y Samborondón, hubo 91 casos de influenza AH1N1. Nadie falleció.

En los distritos de Salud hay brigadas que recorren y vacunan a la gente en su casa.

La tarea no es sencilla, pues hay un alto índice de personas que no acceden a vacunarse aunque este servicio es gratuito. Así lo corroboraron ayer Luz Galarza, Sandra Aguayo y Sonia Ocaña, que integraron la brigada que recorrió algunas calles de Bastión Popular.

Al día cada brigada vacuna entre 80 y 100 personas, por ello el trabajo se cumple a doble jornada. 

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PREVENCIÓN

Lavarse las manos con frecuencia con agua y jabón.

No saludar con beso, ni dar la mano.

Utilizar gel antibacterial para desinfección de manos.

En caso de presentar fiebres superiores a los 38 grados, tos, dolor de garganta o dificultad respiratoria acudir al centro de salud más cercano. Evitar la automedicación. (I)