Guayaquil se proyecta como una ciudad turística y sustentable, por lo que un nuevo contrato en la recolección de desechos y limpieza de la urbe previsto para el próximo mes deberá tener nuevos parámetros para un sistema eficaz, proponen expertos ambientales y estrategas de comunicación.

En la actualidad, Puerto Limpio recoge al menos 4.500 toneladas de desechos, con un contrato prorrogado desde octubre del 2017. El Municipio tiene previsto para el próximo 11 de febrero hacer la licitación para el aseo de la urbe.

Este Diario en diversos recorridos evidenció problemáticas de hacinamiento, depósitos ilegales de escombros, y vías y calles sucias debido al esparcimiento de desechos por los recicladores y chamberos.

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Para Xavier Salgado, de la organización Medio Ambiente Sustentable de Guayaquil, una medida radical es que el nuevo contrato debe contemplar la frecuencia diaria en las 24 subzonas de Guayaquil.

“La empresa que se adjudique el contrato no solo va a recoger las fundas de basura, debe hacer una limpieza con enfoque sustentable, como lo han hecho otras ciudades de Ecuador y Latinoamérica. No podemos decir que Guayaquil podrá ser el atractivo turístico que queremos si al recorrerla se evidencia basura en el norte, centro y sur”, dice el especialista.

César Cárdenas, veedor del Observatorio Ciudadano de Servicios Públicos, indica que es necesario que en Guayaquil haya un sistema de recolección diferenciado por lo menos una vez por semana, para recoger material reciclado como papeles, botellas plásticas, cartones, artefactos electrodomésticos, lo cual generaría ingresos para la ciudad.

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En esto coincide Juan Carlos Erazo, catedrático y especialista en Valorización de Residuos. Él cree que debe haber la separación domiciliaria de desechos, así como una política de que los centros comerciales y patios de comida entreguen sus desechos separados y sin contaminación cruzada.

Otro eje importante, según Erazo, es iniciar un proyecto piloto para que desechos como aerosoles, envases de productos químicos de uso doméstico, envases de pinturas, productos de higiene personal –cremas, bloqueadores solares, perfumes– sean recogidos para evitar que terminen en el relleno sanitario.

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Erazo añade que el número de escombreras existentes no abastece, se deben aumentar y crear programas que se valorice el residuo de construcciones, para que sea reutilizado en fábricas de bloques, ladrillos, fachaletas, adoquines con esos materiales desechados, evitando la extracción de material pétreo de los ecosistemas.

En tanto que el enfoque de trabajo comunitario y campañas es otro punto importante en la nueva gestión.

Raúl Guadalupe, experto en marketing, explica que se debe enfocar en campañas de concienciación ambiental tanto con alumnos como padres de familia, para evitar botar basura en el piso o realizar hacinamientos.

“Debe haber cooperación entre instituciones y la nueva empresa porque la educación del usuario es importante, esto nos ayudará en el tema del reciclaje, evitar el uso de plásticos, mejorar la limpieza en calles y en el estero Salado, que son puntos a los que apuestan las ciudades sustentables”, manifiesta Guadalupe. 

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Multas por tirar desechos en la urbe

El Municipio de Guayaquil tiene 33 tipos de infracciones en la ordenanza que norma el manejo de desechos sólidos. Son 11 infracciones leves, en las que el precio a pagar es de $78,80 (20% del sueldo básico); 13 infracciones graves en las que el monto es de $ 165,48 (42%); y 9 infracciones muy graves en los que el monto a pagar es de $ 492,5 (125%).

La Dirección de Aseo Cantonal del Municipio indicó que los moradores deben estar atentos y denunciar a las personas que provocan hacinamientos en los barrios, basta con tomar foto a los vehículos en los que se movilizan, o alertar a personal municipal. Ellos tienen más de 15 personas vigilando en calles de la urbe. Agregó que se puede llamar al área operativa al 259-4800 con extensión 3337 para las denuncias.

Recomendaciones

Reciclaje

La separación de desechos deberá ser eje central a futuro para que Guayaquil se posicione como ciudad sustentable. Expertos recomiendan la clasificación en el hogar, en establecimientos, para que el recolector al menos una vez por semana recoja los desechos reciclables.

Aumentar frecuencia

Especialistas indican que los recolectores deben pasar de forma diaria en sectores populares, en los que tienen alta población, para evitar basura amontonada.

Escombreras

El aumento del número de escombreras en la urbe es otra de las soluciones que proponen ambientalistas, para evitar hacinamientos de los desechos de construcción en áreas como parques, avenidas, autopistas y vías. Podrían tener un costo mínimo.

Contacto comunitario

A más de las campañas que se han realizado, se recomienda que se debe mejorar en activaciones en barrios, colegios, para promover espacios limpios en los sectores de la urbe. (I)