Cuatro barcos laborarán en el dragado del canal de acceso al puerto de Guayaquil

Obras facilitarán en acceso al puerto de Guayaquil

Guayaquil tiene hoy un acontecimiento histórico en materia portuaria. El Cabildo y la firma Canal de Guayaquil, filial del grupo belga Jan De Nul, la más grande empresa de dragas del mundo, suscriben el contrato para la profundización de los canales de acceso al Puerto Marítimo de la ciudad.

Estos trabajos comprenden el dragado de los 95 kilómetros del canal de acceso al puerto, incluido el corte de los denominados goles, o grandes rocas que están en el trayecto.

La firma contratista lo ve como un desafío. Jan Neckebroeck, gerente de Área de América Latina del grupo Jan De Nul, afirmó a este Diario: “Estamos orgullosos de ser parte de este contrato, que le da a las terminales portuarias de Guayaquil el impulso para competir con las terminales más modernas de los países vecinos”, en la costa Pacífica de América del Sur.

Dicho contrato es por concesión, con la modalidad de alianza público-privada, por 25 años. El contrato fue adjudicado a Jan De Nul el 5 de octubre del 2018. Su oferta ganadora fue 10% más económica que la del consorcio conformado por DEME (China Road and Bridge Corporation y Transoceánica). Canal Guayaquil es la firma local establecida para el efecto por la empresa extranjera, por mandato de la ley. 

La transnacional invertirá un presupuesto para profundizar el canal de acceso, de los 9,5 m existentes a la fecha a 12,5 m, así como para profundizar el río Guayas hasta un calado autorizado de 7,5 m.

Jan De Nul también eliminará la roca en la sección costa afuera del canal, el famoso cuello de botella conocido como Los Goles. Adicionalmente instalará un sistema de servicio de tráfico de embarcaciones, un sistema de control de tráfico y un sistema de cobro.

La firma anticipó que para el inicio del dragado, proyectado para enero, se movilizarán tres dragas de tolva y una draga de corte. En total, se removerían 25 millones de metros cúbicos de material. Una vez que concluyan las obras principales, Canal de Guayaquil operará y mantendrá el trayecto y la inversión la recuperará mediante el cobro de peajes.

El alcalde Jaime Nebot ha destacado la necesidad del dragado. Y lo hacen también quienes están involucrados en el movimiento portuario local.

Uno de ellos es Javier Moreira, presidente de la Cámara Marítima del Ecuador (Camae). Él refiere que era algo que se esperaba en la industria. “Sin esta obra, la subsistencia de Guayaquil (como puerto) era imposible”.

Cita que hoy las naves que entran a la costa ya superan la restricción que tiene Guayaquil, de 9,75 m, inclusive puertos del país como Manta, Puerto Bolívar y, en el futuro, Posorja los superan de largo. “No hacerlo hubiera significado o significaría aniquilar a Guayaquil”, añade Moreira. (I)