Renovados, con invitaciones para ir afuera y nuevos planes regresaron de Islandia Pancho Feraud y Ricardo Chica, integrantes del dúo Abbacook, antes banda musical.

Juntos desde hace un año como dúo, Pancho, voz y guitarra; y Ricardo, en teclado y coros, participaron el 8 de noviembre en el Iceland Airwaves, el festival musical más importante de Islandia y una de las principales atracciones de ese país, que se realizó en la ciudad de Reikiavik con la participación, durante cuatro días, de unas 200 bandas del mundo. “Fuimos los únicos de Sudamérica”, dice orgulloso Fausto, que está en Abbacook desde su origen.

Ellos aplicaron a la convocatoria que se hizo en febrero pasado y recibieron la aceptación en agosto. El festival, básicamente de música independiente, según pidió como requisitos la descripción técnica de la banda, la discografía, biografía, sesiones en vivo, entre otros.

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Los géneros del festival, que este año fue la edición 20, van del hip hop, electrónica, pop, al indie, etcétera.

El Iceland Airwaves se desarrolló en el dowtown de Reikiavik con varios escenarios paralelos, unos cerca de otros. “Había una aplicación donde se revisan escenarios, salas, bares, las bandas que se van a presentar, la historia de cada una, sus canciones, y nos sorprendió bastante esa cultura de allá de investigar las bandas que se van a presentar y que vas a ver, porque de hecho había personas que se nos acercaban y ya sabían algo de nosotros, cuanto tocamos ciertas canciones las cantaban, se las habían aprendido”, recuerda Fausto.

Los temas que Abbacook interpretó fueron Historias, Estelar, Ir más allá, LR, Frío y calor, Lo demás, todos reversionados.

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“En vista de que solo somos dos ahora, tratamos de adaptar y brindar un tipo de propuesta nueva que requiera de menos gente, pero que también fuera más visual, entonces hemos adaptado sintetizadores, lo trabajamos en el estudio, de ahí lo montamos a la computadora y tocamos, ahora es música más electrónica, las canciones están reversionadas a electro pop, más bailables; definitivamente la tecnología es una herramienta que nos ayuda a simplificar y controlar todo”, explica Ricardo.

“Estamos haciendo un buen trabajo y en menos de un año hemos visto los resultados”, puntualiza Pancho.

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Aunque los anteriores integrantes están en otros proyectos, Jorge Campoverde sigue como productor de Abbacook. También los acompaña Anthony Aguilar en el sonido.

Lo demás, cantado al último, fue el tema que más coreó la gente en el festival, y por coincidencias el tema Frío y calor lo cantaron con un músico amigo que estaba en el festival, Steven Dagenais.

El festival, coinciden Pancho y Ricardo, es una vitrina porque van músicos, aparte de los que participan, productores y profesionales de la industria. “Tenemos muchas invitaciones por concretar, se nos abrieron muchas puertas”, dice Fausto, que recuerda que en un hotel coincidieron con KEXP, famosa estación de música independiente y fueron entrevistados.

El dío Abbacook prepara un documental con presentaciones en vivo y entrevistas en el marco del festival en Islandia y lo piensan sacar en febrero próximo.

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Este viernes se presentarán en Quito, en Ananké. (E)

El festival es un punto de encuentro de agentes de la música, de productores, de músicos, de medios de comunicación especializados, fue una vitrina para nosotros.Pancho Feraud, integrante de Abbacook