Yo soy la actividad de Dios en expresión.

Gracia
La gracia de Dios es como un río que fluye –un manantial de luz, amor y abundancia– y que tiernamente me guía a lo largo de las circunstancias de la vida. No necesito preocuparme de por qué o cómo la gracia de Dios es revelada. Simplemente confío en que gracias a ella tendré la comprensión, los recursos y las habilidades para hacer que cosas buenas sucedan en mi vida.“Pero por la gracia de Dios soy lo que soy, y su gracia para conmigo no ha sido en vano”. Estas palabras de Pablo a los corintios me recuerdan que puedo llevar una vida libre y abundante. Cualquiera que sea mi necesidad, o lo que me preocupe, puedo estar seguro de que la gracia divina me dará la respuesta. La gracia de Dios es más que suficiente para mí porque yo soy la actividad de Dios en expresión.

1 Corintios 15:10
Por la gracia de Dios soy lo que soy. (F)